En el líquido amniótico, la clave contra enfermedad letal

En el líquido amniótico, la clave contra enfermedad letal

Doctores aseguran que en el líquido amniótico puede estar la clave de la cura de una enfermedad intestinal letal que afecta a los bebés prematuros.

La inflamación severa, llamada Enterocolitis necrosante (ECN), puede destruir el tejido del intestino y producir un fallo importante en el órgano.

Pruebas preliminares en animales, publicadas en la revista Gut, mostraron que las células madre dentro del líquido amniótico podrían curar parte de la lesión y aumentar las posibilidades de supervivencia.

No obstante, los especialistas aclaran que es necesario realizar más pruebas antes de probarlo en bebés prematuros.

En el útero

Los bebés que nacen muy pronto no están preparados para el mundo exterior y sus intestinos no están listos para procesar alimentos. Alrededor de uno de cada diez bebés prematuros en cuidados intensivos desarrolla ECN.

La inflamación puede causar la muerte del tejido y provocar un agujero en los intestinos del bebé, que puede resultar en una infección seria.

La leche materna puede reducir los riesgos, pero el único gran tratamiento es una cirugía para retirar el tejido malo. Sin embargo, el 40% de aquellos que necesitan una intervención quirúrgica no sobrevivirá.

El líquido amniótico rodea y amortigua al embrión en desarrollo en el útero.

"Es un problema que creemos irá en aumento", dijo Simon Eaton, del Instituto de Salud Infantil de la University College London.

Eaton formó parte del equipo que investigó el uso de células madre -que se pueden convertir en cualquier otro tipo de célula del cuerpo, desde un nervio a un hueso- del líquido amniótico que rodea y amortigua al feto durante su desarrollo en el útero.

En experimentos con ratas de laboratorio, programadas para desarrollar Enterocolitis necrosante letal, las inyecciones de células madre parecieron aumentar la tasa de supervivencia.

Eaton le dijo a la BBC que pudieron "prolongar la supervivencia un buen trecho".

"Lo que pareciera ocurrir es un efecto directo en calmar la inflamación y en la estimulación de las células madre residentes en el intestino para que sean más eficientes en la reparación del órgano".

El estudio, financiado por la fundación del hospital de niños Great Ormond Street, demostró que los intestinos de los animales funcionaban mejor tras el tratamiento.

¿Riesgo de cáncer?

Por su parte, otro de los investigadores, Paolo De Coppi, dijo que "se sabe que las células madre tienen un efecto antiinflamatorio, pero esta es la primera vez que hemos demostrado que las células madre del líquido amniótico pueden reparar los daños en el intestino".

"A pesar de que el líquido amniótico tiene una capacidad más limitada de desarrollar diferentes tipos de células que aquellas del embrión, son prometedoras para muchas partes del cuerpo, incluyendo el riñón, músculos y sistema nervioso".

Se necesitan más pruebas para determinar si el tratamiento puede funcionar en bebés y si es seguro.

Las células madre tendrían que tomarse de un donante debido a que no sería práctico guardar el fluido de cada nacimiento, por si acaso. Esto significa que hay un riesgo de rechazo.

Debido a que las células madre son capaces de convertirse en otro tipo de células, también existe la preocupación de que representen un riesgo de cáncer.

No obstante, los doctores esperan que en el futuro puedan emplear un fármaco.

"No son las células las que están suministrando algo, y si supiéramos qué es lo que liberan, podríamos suministrarlo directamente", explicó Eaton

 

 

 

radioroja

Website: