Archives noviembre 2017

Cómo se explica la obesidad de Luis Manuel, el bebé mexicano que a los 11 meses pesa 28 kilos

La imagen del bebé mexicano Luis Manuel González ha dado la vuelta al mundo en los últimos días.
Con sólo 11 meses, el niño nacido en el estado de Colima, en el oeste de México, llegó a 28 kilos, el peso de un niño de 9 años.
Luis Manuel es considerado el bebé mas obeso del mundo, pero al nacer tuvo un peso normal de 3,58 kilos.
¿Cómo se explica la obesidad de Luis Manuel? ¿Es posible curarlo?

Luis Manuel vive con sus padres y su hermano mayor en Colima
BBC Mundo habló con el médico que trata actualmente al bebé, el cardiólogo mexicano Gustavo Orozco, del Instituto de Investigación de la Inflamación en Guadalajara.
Orozco explicó cual es el diagnóstico de Luis Manuel y en qué consiste el tratamiento “sin medicamentos” con el que espera reducir la obesidad del niño.
Inflamación celular
En un principio se pensó que el bebé padecía el llamado Síndrome de Prader Willi, una enfermedad que desencadena un hambre insaciable. Pero esa posibilidad fue descartada.
“El niño no tiene Prader Willi de acuerdo a las pruebas genéticas que le realizó el Instituto Mexicano del Seguro Social”, señaló Orozco.
“Yo no tengo acceso al original del resultado pero de acuerdo a entrevistas con la madre es lo que le notificaron”.

“El diagnóstico que hicimos es que el niño padece de una obesidad ocasionada por inflamación celular”, explicó el Dr. Orozco.
“El diagnóstico que hicimos es que el niño padece de una obesidad ocasionada por inflamación celular”, explicó el médico.
Esa inflamación celular hace que el bebé crezca en forma desordenada. Y resulta de una deficiencia en la sangre y la leche maternas de EPA y DHA, grasas omega 3 esenciales para activar el metabolismo y evitar la obesidad de los bebés.
El diagnóstico de inflamación celular fue posible gracias a una prueba que se realiza para el público -no sólo para investigación- en apenas tres laboratorios: en Múnich, Alemania, en Guelph, Canadá, y en el instituto privado en que trabaja el doctor Orozco.
Se trata de un instituto filial de la Fundación para la Investigación de la Inflamación, Inflammation Research Foundation o IRF, con sede en Boston.
Bebés programados
Luis Manuel tiene una obesidad “que fue programada en el vientre materno por deficiencias nutricionales durante el embarazo” y posteriormente en la lactancia, afirmó Orozco.

Luis Manuel nació en Tecoma, en el estado de Colima. El bebé tuvo un peso normal al nacer, de 3,58 kilos. Pero al mes ya era un niño obeso.
¿Qué significa “programada”?
“Investigaciones hechas en Canadá y Alemania señalan que la mujer embarazada debe consumir ciertas grasas que evitan que el cerebro, el páncreas y los órganos internos del niño queden programados para producir ciertas hormonas en exceso que hacen que el tejido adiposo aumente en forma dramática”, explica el cardiólogo.
Las investigaciones pioneras sobre este tema en Guelph, Ontario, comenzaron precisamente cuando los científicos detectaran que las madres esquimales tenían niveles muy elevados de omega 3 por su alimentación, y que ninguno de sus hijos era obeso.
“Tatuado en las células”
Orozco explicó que durante el embarazo hay ventanas de oportunidad en que se programa la futura salud o enfermedad del niño cuando sea adulto.
“Queda como tatuado dentro de las células cómo se comportarán ante la alimentación o la enfermedad”.
Hay grasas que protegen al niño y evitan la inflamación celular, pero Luis Manuel no recibió niveles adecuados de esas grasas omega 3.
El bebé come normalmente pero responde produciendo demasiadas hormonas, “principalmente insulina y esa hormona en exceso produce que el tejido adiposo aumente de tamaño”.
Leche materna y grasas omega 3
Orozco explicó la importancia de las EPA y DHA, las grasas omega 3 que estaban en niveles deficientes en la sangre y la leche de Isabel Pantoja, la madre de Luis Manuel.
“La leche materna es mucho más rica en todas las grasas que cualquier otro alimento, tiene poca proteína, un poco de azúcares y mucho más grasas”.

Luis Manuel come normalmente pero responde produciendo demasiadas hormonas, “principalmente insulina y esa hormona en exceso produce que el tejido adiposo aumente de tamaño”.
“Una las grasas que tiene efecto benéfico se llama EPA omega 3, proveniente del pescado que la mamá guarda en su tejido adiposo. Por eso las mamás tienen que subir entre 8 y 10 kilogramos de peso y dentro de su tejido adiposo deben guardar esa grasa”.
El cardiólogo mexicano señaló que la grasa EPA pasa del tejido adiposo de la mama al bebé a través de la placenta, bajando la inflamación de los tejidos. “Lo que hace es silenciar los genes de la obesidad”.
“Por otra parte, la grasa DHA omega 3 también derivada del pescado, se acumula igualmente en el tejido adiposo de la mamá pero sobre todo en la grasa alrededor de las glándulas mamarias”.
Cuando el bebé nace, esta grasa baja a través de la leche al bebé y aumenta su metabolismo.
El caso de Luis Manuel es una “tormenta perfecta” en que coincidieron además de las deficiencias de omega 3 otros factores como una tendencia genética que es heredada de los padres.
“Si una mujer no consume estas grasas omega 3 pero su tendencia genética no es mucho hacia la obesidad, aunque haya consumido poco omega 3 no va a tener una obesidad tan severa en sus hijos”.
Suplementos sin contaminantes
La deficiencia en grasas omega 3 de la madre de Luis Manuel podía haberse corregido simplemente con suplementos.
El problema, según Orozco, es que a veces se recomienda dar a las madres solamente DHA omega 3, pero falta el EPA que baja la inflamación en los tejidos. “Si no se dan las dos cosas juntas no se da el efecto benéfico”.

El caso de Luis Manuel es una “tormenta perfecta” en que coincidieron además de las deficiencias de omega 3 otros factores como una tendencia genética.
El experto también señala que es importante verificar que se trata de suplementos de calidad para consumo humano.
“Hoy los mares están contaminados por sustancias toxicas que se vierten al mar y el pescado contiene muchos contaminantes junto con el omega 3”, explicó.
“De hecho las asociaciones de ginecoobstetricia de Canadá sugieren que la mujer embarazada no coma más de dos veces pescado porque tienen contaminantes. Hay que tomar un suplemento que tenga EPA y DHA en concentración alta, del 75% por lo menos del peso de una cápsula, y que no tenga contaminantes”.
“Hay páginas de internet donde se puede ver si una marca de suplementos está libre de contaminantes y tiene la concentración debida de omega 3. En México está la página www.omega3consumohumano.com.mx”.
El doctor Orozco explicó que en otros países como Alemania se monitorea los niveles de omega 3 de las mujeres embarazadas para prescribir suplementos, e incluso se analiza el nivel de omega 3 en la sangre del cordón umbilical luego del parto para determinar el estado de salud del bebé.
Tratamiento “increíble”

El tratamiento del bebé es nutricional. “Tiene que ser una dieta donde el consumo de azúcares refinados baje severamente y sea alta en grasas antiinflamatorias”.
¿Qué puede hacer Orozco para ayudar a Luis Manuel?
“El tratamiento del bebé por increíble que parezca no consiste en medicamentos y por increíble que parezca no es una cirugía”, explicó el cardiólogo.
“El tratamiento del bebé es nutricional. Tiene ser una dieta donde el consumo de azúcares refinados baje severamente para que el cuerpo no produzca mucha insulina cada vez que el niño come azúcares”.
“Y debe ser alta en grasas. Pero hablamos de grasas antiinflamatorias derivadas del aceite de oliva, de las almendras y nueces y sobre todo de las grasas derivadas del pescado no solamente en alimentos sino en forma de suplemento nutricional omega 3 para consumo humano en forma líquida, en dosis muy altas como 10 gramos por día”.
“Y vamos a ir monitoreando la sangre del bebé para ver si esos 10 gramos alcanzan para bajar la inflamación o tenemos que subir la dosis”.
Luis Manuel sentado en una cama recibe un abrazo y un beso de su madre Isabel PantojaDerechos de autor de la imagenAFP
Image caption
El bebé recibirá suplementos nutricionales omega 3 para consumo humano en forma líquida en dosis muy altas como 10 gramos por día.
Tres meses
El doctor Orozco señaló que no hay casos previos de tratamientos con otros bebés similares a Luis Manuel.
“Pero tenemos un antecedente. Hace años tratamos un niño que tenía 9 años y pesaba alrededor de 65 kilos en esta zona de nuestro país. Y lo que observamos es que tardamos tres meses en reducir la grasa corporal en un 40% respecto a la grasa inicial”.
“Ojalá tengamos el tiempo suficiente para en tres meses reducir la grasa y evitar complicaciones, porque el caso de este niño lamentablemente ya se ha complicado ya que hay grasa encima del corazón, de los pulmones y del hígado”.
Orozco señaló que hay una ventana de dos años desde que nace un bebé en la que se puede reprogramar ciertas respuestas de su organismo.
Y es posible según el experto que con cambios nutricionales y dosis de mantenimiento de grasas omega 3, Luis Manuel no sea en el futuro un adulto obeso.

La celebración por la clasificación de Perú a Rusia 2018 desde el epicentro de la fiesta

Mi camiseta de la selección peruana está empapada y ya no sé si son mis lágrimas o las lágrimas de todos los que vinieron a abrazarme.
“¡Estamos en el Mundial, carajo!”, gritan a mi lado. O quizá soy yo el que está gritando.

Qué más da. Los aullidos y los cantos de la multitud que ha tomado las calles de mi barrio son finalmente los ecos de una misma explosión que los peruanos llevamos atravesada en la garganta por demasiado tiempo.
Por 36 años.
No hubo una fiesta así desde el 6 de setiembre de 1981, cuando Perú clasificó por última vez a un Mundial, luego de empatarle a Uruguay en Lima.
Yo nací un mes después.

El grito de Jefferson Farfán tuvo eco en todos los rincones de Perú.
Desde entonces, el parque Kennedy, en el distrito de Miraflores, el epicentro limeño de nuestras poquísimas celebraciones deportivas, comenzó a poblarse de gatos en busca de un ambiente sin sobresaltos.
Pero esta noche no hay gatos.
No conozco a los que me abrazan. No sé de donde vinieron. No sé quiénes son los que me dejan sus lágrimas en el hombro”
Martín Riepl
Encaramados sobre árboles que no existían durante la última celebración, varios jóvenes rebolean sus camisetas entre las ramas.
“Esta es tu hinchada y no te deja, no te deja de alentar”, corean mientras un bombo les marca el ritmo.
La policía los ve y pasa sonriendo. Esta noche, el uniforme de mayor autoridad es la camiseta blanca con una franja roja cruzando el pecho.
Se han vendido tantas durante las últimas semanas que el Banco Central de Reserva del Perú calcula que han tenido un impacto medible en la economía del país: el 23% de las empresas del sector comercial han aumentado su facturación.

Generaciones de aficionados no habían vivido lo que ocurrió en la noche del miércoles.
En el parque el ambiente huele a cerveza y a pólvora. Los fuegos artificiales estallan sobre nosotros.
Si algún sonido refleja alegría, aquí estaban todos: risas, bombardas, música, palmas, cánticos y aquellos llantos que se acercan al silencio y nos dibujan una leve sonrisa.
La gran mayoría de quienes celebra son jóvenes que no pasan los 35 años.
Esa es mi generación.

Aquella que nunca vio a su selección en la copa FIFA y que creció escuchando la misma broma, repetida cien veces en los distintos acentos latinoamericanos: “¿Y que hace Perú cuando acaba un partido del Mundial? Pues apaga el Play Station”.
Nuestros referentes mundialistas fueron jugadores que apenas podíamos distinguir en imágenes en blanco y negro, que los canales de televisión repetían una y otra vez durante cada eliminatoria fracasada.
Crecimos con los mitos de nuestros padres, que amarilleaban en periódicos de 1970 y 1982.

Jarizinho se prepara para anotar el cuarto gol de Brasil frente a Perú en la que fue la mejor participación mundialista de la Blanquirroja.
Ahora tenemos nuestras propias historias.
“Esto es lo que quiero que mi hijo recuerde”, me dice un muchacho que no pasa los 30 años que carga un niño sobre sus hombros.
“Esto yo nunca lo viví”, señala. El niño lleva una pequeña camiseta.
Esto es lo que quiero que quiero que mi hijo recuerde”
Aficionado peruano
Decenas o quizás cientos de banderas rojas y blancas se agitan sobre un mar tan extenso de gente abriendo cervezas, gritando, saltando y abrazándose, que sería fácil creer que los confines de esta fiesta son también las fronteras del país.
Como en Miraflores, en las plazas de las ciudades más importantes de la costa, los andes y la selva amazónica los alcaldes armaron pantallas gigantes.

El autor de la nota (extremo izquierdo) junto a un grupo de amigos durante las celebraciones. Ninguno de ellos ha visto a Perú jugar un Mundial. (Foto: Martín Riepl)
En los pueblos más pequeños, los vecinos sacaron sus televisores a la calle.
El encuentro que nos clasificó al Mundial de Rusia 2018 fue menos un partido de fútbol y más una liturgia para reconocernos como una comunidad.
Cuando el árbitro francés pitó el final del partido, miles en el parque Kennedy levantan los brazos, como si apuntaran a los petardos que ya revientan sobre ellos, y los dejan caer en un abrazo hacia cualquiera que tuvieran al lado.
Y entonces empiezan las lágrimas.
No conozco a los que me abrazan. No sé de donde vinieron. No sé quiénes son los que me dejan sus lágrimas en el hombro. No sé quiénes se llevaron las mías.
Ojalá nunca nos quitáramos estas camisetas.

El Arbol Desorientado Reflexion

Había una vez, en algún lugar que podría ser cualquier lugar, y en un tiempo que podría ser cualquier tiempo, un hermoso jardín, con manzanos, naranjos, perales y bellísimos rosales, todos ellos felices y satisfechos.

Todo era alegría en el jardín, excepto por un árbol profundamente triste. El pobre tenía un problema: “No sabía quién era.”

.- Lo que te falta es concentración-le decía el manzano-si realmente lo intentas, podrás tener sabrosas manzanas.¿Ves que fácil es?

.- No lo escuches-exigía el rosal- Es más sencillo tener rosas y ¿Ves que bellas son?

 

Y el árbol desesperado, intentaba todo lo que le sugerían, y como no lograba ser como los demás, se sentía cada vez más frustrado.

Un día llegó hasta el jardín el búho, la más sabia de las aves, y al ver la desesperación del árbol, exclamó:

.- No te preocupes, tu problema no es tan grave, es el mismo de muchísimos seres sobre la Tierra. Yo te daré la solución, no dediques tu vida a ser como los demás quieran que seas, sé lo que tu quieres ser, y para lograrlo, escúchate.

Y dicho esto, el búho desapareció.

 

¿Lo que yo quiera ser?-se preguntaba el árbol desesperado, cuándo de pronto, comprendió. Y cerrando los ojos y los oídos, abrió el corazón, y por fin pudo escucharse:

“Jamás daré manzanas porque no soy un manzano, ni floreceré cada primavera porque no soy un rosal. Soy un roble, y mi destino es crecer grande y majestuoso, dar cobijo a las aves, sombra a los viajeros, belleza al paisaje. Tengo una misión, tengo que cumplirla”.

Y el árbol se sintió fuerte y seguro y se dispuso a ser todo aquello para lo cual había sido creado y porque lo que creía.

Así, pronto llenó su espacio y fue admirado y respetado por todos.

Y sólo entonces el jardín fue completamente feliz.

La razón de la repentina desaparición de las icónicas cascadas de Agua Azul en México

El paraíso se detuvo repentinamente y nadie entendía lo que pasaba.
Los que viven cerca de las cascadas de Agua Azul, uno de los balnearios más visitados del sureste de México, quedaron asombrados cuando el agua prácticamente dejó de fluir.

“Nunca había pasado por nuestra mente la idea de que algún día pudiera secarse la cascada principal”, dijo Alberto López, miembro de la administración del balneario al diario La Jornada.
“Desde niños conocemos este río y siempre ha estado igual, pero de repente vimos que las piedras empezaron a salir a flote”, explicó.
Conocida como La Golondrina, la cascada principal de Agua Azul ha sido admirada durante décadas por el imponente color turquesa de sus aguas en un lugar que es visitado por unas 200.000 personas cada año.
Pero el pasado viernes, los habitantes del municipio comenzaron a notar cómo el agua en La Golondrina dejaba de fluir, casi como si alguien hubiera cerrado un grifo y solo quedara un leve remanente.
Y es que, en un momento, el nivel del agua cayó en un 85% en el río que alimenta la cascada, explicó a BBC Mundo el director de Protección Civil del estado de Chiapas, Luis Manuel García.
Los turistas que conocen las postales de esta atracción natural en su máximo esplendor se encontraron con un lugar muy diferente.

“Tristeza”
El color turquesa característico del agua de las cascadas se debe a la alta presencia de minerales en las rocas calizas sobre las cuales circula el afluente del río que las alimenta.

Las cascadas de Agua Azul son uno de los principales atractivos naturales que visitan turistas nacionales y extranjeros en Chiapas.
En los meses pasados el caudal del afluente había disminuido, pero no se había registrado una falta de agua como la que se dio el jueves y viernes de la semana pasada.
La situación pronto generó “tristeza” y “preocupación” entre los pobladores locales, pues el turismo es una de las principales fuentes de ingresos en esa región de Chiapas.
“En 41 años de operación no había pasado algo igual, ni en abril o mayo, que baja el nivel de agua por falta de lluvias”, dijo Alberto López a La Jornada.
Expertos de la Comisión Nacional del Agua, de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas y de Protección Civil estatal comenzaron a investigar para descubrir qué había pasado.
Daño natural
El pasado 7 de septiembre, los estados de Chiapas y Oaxaca padecieron las consecuencias del terremoto de magnitud 8,2, el más potente que se haya registrado en México en el último siglo, que dejó decenas de muertos y heridos y cuantiosos daños materiales.

Ahora se sabe que también causó estragos en las cascadas de Agua Azul .
En una sección del río Xanil que alimenta las cascadas se registróun colapso de rocas, lo que poco a poco fue cerrando el paso del agua hacia el afluente que alimenta a la cascada La Golondrina, la principal de la zona.

Los visitantes de las cascadas de Agua Azul se encontraron con la ausencia de agua. (Foto: Alfonso García)
Esta situación fue la principal causante de la ausencia de agua, pero también hay otro motivo que no es de origen natural.
Daño del ser humano
La región de las cascadas de Agua Azul está resguarda por la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas.
Sin embargo, a varios kilómetros de ahí, la riqueza forestal de la selva Lacandona está siendo explotada a través de cambios en el “uso de suelo”.
Las autoridades de Chiapas encontraron que en una de las zonas que ya no están bajo protección ecológica se registró un hecho que ya tiene impacto en la presencia de agua en las cascadas.

Las autoridades federales y estatales explicaron los factores que causaron la falta de agua en las cascadas de Agua Azul. (Foto: PC Chiapas)
“Catorce kilómetros arriba, en el río, encontramos un área de deforestación acelerada”, indicó Luis Manuel García, director de Protección Civil de Chiapas, a BBC Mundo.
La tala de árboles, al alterar el ciclo del agua, tiene efectos en el caudal del río Xanil, y por ende, a las cascadas de Agua Azul.
“Tenemos que hacer lo pertinente para reforestar y regenerar el ciclo del agua”, dijo García.
¿Está en riesgo el paraíso?
Durante el domingo y este lunes, las autoridades realizaron trabajos para devolver el cauce del agua al afluente que alimenta a las cascadas de Agua Azul.
Así, el agua empezó a fluir de nuevo sobre la cascada de La Golondrina y otras piscinas naturales que se forman en las rocas.
Pero la recuperación integral del ecosistema requiere de un estudio más amplio cuyos primeros resultados estarán disponibles a finales de este año, indicó este lunes Juan Limón, de la Comisión Nacional del Agua.
La Golondrina recuperó el agua este lunes, pero su turquesa característico se perdió por ahora. (Foto: Alfonso García)
“Esto no va a ser una solución inmediata, es de mediano y largo plazo”, dijo
Los visitantes que llegaron este lunes hasta las cascadas de Agua Azul se encontraron con que La Golondrina de nuevo tiene un flujo que cubre todo el ancho de la caída de agua.
“El día de ayer se retiró el material (las rocas caídas) y con las lluvias generadas por el frente frío número 9, el día de hoy ya se incrementó el margen de agua del lado derecho, rescatando la cascada”, explicó Luis Manuel García.
El turquesa de las aguas se volvió color café debido a la gran cantidad de agua que llegó repentinamente.
Pero las autoridades reconocen que es una primera advertencia de que este paraíso natural puede verse seriamente comprometido si no se actúa de manera inmediata.
“La afectación lleva años en un proceso de deterioro y nos va a tomar tiempo resolverlo de manera adecuada”, advirtió Juan Limón.

¿Por qué muchos negocios adelantan el Black Friday en Estados Unidos?

Si para muchas personas diciembre es sinónimo de Navidad, para algunos estadounidenses noviembre equivale a otro evento que, a diferencia de este, se declara abiertamente comercial y consumista: el Black Friday.
El Viernes Negro es el día en que los comercios del país comienzan la temporada navideña, ya que miles de personas eligen esa jornada, posterior a la fiesta de Acción de Gracias, para salir a comprar los regalos.
Para aprovechar esta disposición a gastar, los negocios ofrecen ese día los mayores descuentos del año y amplían sus horarios.
Algunos abren la noche anterior y suelen encontrarse largas colas de clientes que entran en estampida.
Algo que incluso ha generado accidentes y las muertes de un trabajador y de un comprador en la última década.

Algunos hacen cola para conseguir los mejores descuentos el día de Black Friday.
Este año, en cambio, ya no es necesario esperar al viernes 24 para batirse cuerpo a cuerpo por un artículo a mitad de precio.
Grandes cadenas y comercios electrónicos han adelantado las ofertas, algunos desde el inicio del mes.

Quienes contaban los días hasta el Black Friday para ahorrar ahora deben decidir si aprovechan descuentos que tal vez no lleguen a repetirse después de Acción de Gracias o si esperan por si acaso otro establecimiento haga una rebaja aún mejor.
Miedo a quedarse atrás
Uno de los primeros en ofrecer descuentos fue Amazon, que el 1 de noviembre empezó una cuenta atrás para la llegada del Black Friday.
Cada día desde entonces, el gigante del comercio electrónico anuncia ofertas en cientos de artículos hasta llegar a la gran jornada del 24.

Muchos esperan hasta este día para realizar compras grandes, como la de electrodomésticos.
La cadena de productos electrónicos Best Buy y la de hipermercados Walmart también empezaron esta semana con las rebajas.
Que grandes establecimientos comiencen a vender a bajos precios antes de tiempo puede resultar una amenaza para sus competidores, en especial, para los de menor tamaño.
Por eso muchos han decidido seguirles los pasos para no quedarse atrás, según afirmó la responsable de marketing de la agencia de estudios de mercados DynamicAction, Sarah Engel, al diario estadounidense Washington Post.

Después de todo, el cliente que compra un televisor o un refrigerador a principios de mes rara vez repetirá un desembolso tan grande a las pocas semanas, según explicó.
Ya el año pasado, el presidente de la National Retail Federation (Federación Nacional de Comerciantes), Michael Shay, había observado en una nota de prensa que los estadounidenses empezaban cada vez más temprano la caza de ofertas.

Más de la mitad de estadounidenses ya había comprado algún regalo navideño el 8 de noviembre del año pasado.
“Los consumidores comienzan a buscar buenos precios y promociones con más antelación que nunca y los vendedores responden a esa demanda ofreciendo descuentos de Black Friday tan pronto como el día después de Halloween”, dijo entonces.
Una encuesta realizada el año pasado por su patronal reveló que más de la mitad de los estadounidenses (55,7%) ya había comprado algún regalo navideño el 8 de noviembre de ese año.
En América Latina, algunos países se han sumado en los últimos años a la celebración del Black Friday y de su versión digital, el Cyber Monday, que se realiza el lunes siguiente.
Entre ellos están Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Perú, Paraguay, Uruguay, El Salvador, Costa Rica, República Dominicana, Nicaragua y Panamá.