El dueño de una tienda de muebles en Texas, Estados Unidos, perdió US$7 millones por haber hecho una promoción en la que prometía reembolsar el dinero a sus clientes si los Halcones Marinos de Seattle ganaban a los Broncos de Denver en la final del Super Bowl -"súper tazón"- el domingo.
Los Broncos perdieron 43 a 8.
Describiendo la derrota como un gasto de márketing, el filosófico comerciante, Jim McIngyale, a quien conocen como "Mattress Mack", dijo que la historia está teniendo una tremenda repercusión en redes sociales, si bien su contable está desesperado.
Para ganar, los clientes tenían que gastarse al menos US$6.000, y mil de ellos lo hicieron.