Archives 2019

La respuesta de Instagram a las acusaciones de que promueve el suicidio infantil

“No tengo ninguna duda de que Instagram ayudó a matar a mi hija”.

Esas son las palabras con las que Ian Russell, el padre de Molly, una niña de 14 años que se suicidó en 2017, ha puesto entre las cuerdas a la red social, a la que acusa de exponer “contenido estremecedor” que “anima a autolesionarse.”

Tras la muerte de Molly, la familia analizó las cuentas de las redes sociales que tenía la pequeña. Había contenido sobre la depresión y las autolesiones. “Me acuerdo de encontrar un dibujo que decía lo siguiente: ‘Este mundo es muy cruel, ya no quiero verlo más’”, le contó Russell a la BBC en un programa emitido este martes.

Russell también declaró que Molly accedió a “cuentas de gente que estaba deprimida, que se autolesionaba o que se planteaba el suicidio”.

Molly dejó notas en las que explicaba cómo se sentía.

Su padre dice que el contenido que vio en Instagram incentivó su muerte.
En un primer momento, la red social no quiso pronunciarse demasiado al respecto.

Cuando la BBC trató de contactar a sus responsables, estos no quisieron hacer comentarios. Tan solo emitieron un comunicado asegurando que Instagram “no permite ese tipo de contenido” y que lo elimina de su plataforma.

Pero la red social ha roto su silencio.

“Devastador” y “complicado”
Steve Hatch, director de Facebook -la compañía a la que pertenece Instagram- para Europa del Norte, le contó a la BBC en una entrevista en exclusiva que la muerte de Molly Russell fue un “suceso devastador”.

Hatch le dijo al editor de la BBC Amol Rajan que se sintió “profundamente afligido” cuando escuchó las acusaciones del padre de Molly en las que aseguró que la red social es, en parte, responsable de la muerte de la niña.

Molly era la pequeña de tres hermanas.
“No me puedo ni imaginar cómo se siente el padre de Molly y el resto de la familia”, declaró.

Cuando Rajan le mostró imágenes de autolesiones que supuestamente van en contra de las políticas de Instagram, pero, aún así, disponibles en la red social, el ejecutivo respondió lo siguiente: “Tenemos que asegurarnos de que analizamos estas imágenes y nos aseguramos de que son eliminadas”.

Hatch también dijo que Instagram revisa sus políticas constantemente en todo lo relacionado con imágenes sobre depresión y suicido.

“Es un asunto muy complicado”, añadió.

Steve Hatch es el director de Facebook para Europa del Norte.
“Trabajamos con expertos que ayudan a diseñar las políticas sobre las imágenes de autolesiones. Es un área muy compleja”.

“Los expertos nos dice que cuando esas imágenes son publicadas por personas que están pasando, claramente, por una situación muy difícil, muchas veces lo hacen porque buscan apoyo o ayuda”.

“En esos casos, puede ser muy útil y de mucha ayuda que esas imágenes estén disponibles en la plataforma. Por eso las permitimos y ofrecemos apoyo a quienes las puedan ver”.

“Lo que no permitimos son las que aplauden o ensalzan (el suicidio)”.

No quiso, sin embargo, responder a la pregunta de si permite a sus hijos usar Instagram, pero señaló que la red social “trabaja duro” en eliminar ese tipo de imágenes y que también ofrece “mucho apoyo” a la gente.

Filtros de contenido
La BBC buscó en Instagram el contenido que aparecía con el “hashtag” (etiqueta) de “selfharm” (autolesión, en inglés) y encontró imágenes muy explícitas de los usuarios.

Instagram dice que el problema es “complejo”.
Además, los algoritmos hacen que los hashtags ayuden a encontrar más contenido similar.

Ese material sigue estando disponible en la plataforma. Y aunque Instagram cuenta con una herramienta que advierte sobre ciertos términos de búsqueda y ofrece ayuda, los usuarios pueden ignorar la ayuda, seguir navegando y acceder a ese material de todas formas.

La red social creó esos nuevos “filtros de contenido” a partir de otra investigación de la BBC, en la que se resaltó cómo la red social promueve la anorexia y la bulimia.

Fuente: www.bbc.com

5 aspectos “diferentes” (y a veces peligrosos) de la cultura laboral japonesa

Si hay un lugar donde las diferencias entre la cultura occidental y la japonesa son dramáticas, ese es la oficina.

Y es que a ojos de un occidental, la cultura laboral japonesa resulta de lo más llamativa y en ocasiones extrema.

Te compartimos cinco aspectos peculiares de la cultura japonesa del trabajo.

1. Karoshi
En español, ‘karoshi’ significa ‘muerte por exceso de trabajo’.

Y aunque parezca difícil de creer, describe un fenómeno que padece la sociedad japonesa y que ha sido reconocido desde 1987, pues ‘matarse a trabajar’, literalmente, es algo que le ha ocurrido a miles de personas.

En una cultura en la que lo normal es estar toda la vida en el mismo trabajo, para algunos empleados puede ser muy difícil renunciar.
Contrario a lo que muchos imaginarían, la causa del karoshi no es en sí el estrés ni la falta de sueño —aunque ciertamente son problemas para la salud a largo plazo—, sino problemas físicos derivados del exceso de horas en el lugar de trabajo.

Al analizar los hábitos y la salud de más de 600.000 personas, una investigación de un grupo de profesores finlandeses publicada en la revista científica The Lancet apunta a que quienes hacen muchas horas extraordinarias corren mayor riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular.

Las muertes por exceso de trabajo han llegado a convertirse en un problema de salud pública hasta tal punto que si un juez determina que se trata de un caso de karoshi, su familia recibe una compensación de unos US$20.000 por parte del gobierno y una indemnización de la empresa, que ha llegado a ser de hasta US$1,6 millones.

2. Horas extra
Muchos de nosotros hemos tenido permanecer en el trabajo horas de más para terminar algún proyecto o tal vez para dar una buena impresión al jefe.

Más raro es eso de haber trabajado tanto tiempo extra como para poner en peligro su salud.

El exceso de horas de trabajo ya tiene consecuencias en la salud pública de Japón.
Según datos del Ministerio de Salud, Trabajo y Bienestar de Japón, el 9,3% de los empleados en trabajos corporativos y 13,6% de las personas que trabajan de manera independiente laboraron más de 60 horas a la semana.

También, 58,4% de los empleados en trabajos corporativos y 61% de los trabajadores independientes dijeron tener problemas y estrés relacionado con su trabajo.

Aunque se han estado tomando medidas para reducir la posibilidad de muertes debido al exceso de trabajo, resulta difícil romper con una cultura laboral en la que es mal visto que un empleado se marche a casa antes que su jefe.

Como una posible solución, a principios de 2017 el gobierno implementó los Viernes Premium, con los que se exhorta a las empresas a que dejen salir temprano a sus empleados —a las 3 pm— el último viernes de cada mes.

3. Inemuri
En las sociedades occidentales no está demasiado bien visto eso de quedarse dormido en un lugar público o en el despacho, pero en Japón es de lo más común ver a gente durmiendo en los trenes subterráneos, asientos públicos o áreas de trabajo sin que cause ninguna sorpresa.

Se trata del inemuri, una especie de duermevela que no implica dormir ni hacer siesta.

La palabra, que se compone de dos caracteres: “I”, que significa “estar presente” o estar alerta en una situación, y “nemuri”, que significa “sueño”, implica que la persona tiene que ser capaz de volver a una situación social cuando se requiera.

Aunque es común ver a gente descansando en público, el “inemuri” no es lo mismo que el sueño o una siesta.
¿Y por qué no está mal visto el inemuri?

“Dado que el cansancio y la enfermedad a menudo son vistos como el resultado de los esfuerzos laborales, inemuri -o incluso simular inemuri cerrando los ojos- se ve como una señal de que una persona ha estado trabajando duro, pero aún tiene la fuerza y la virtud moral necesaria para mantenerse a sí mismo y sus sentimientos bajo control”, señala Brigitte Steger en un artículo de BBC Future.

4. Miedo a renunciar
Mientras algunas personas hartas de su trabajo o de sus condiciones laborales sueñan con el momento en el que puedan decir “renuncio”, a otros la idea de acercarse a su jefe para dar el último aviso les puede resultar extremadamente abrumador.

Al punto de preferir que alguien más lo haga en su lugar y hasta pagarle.

Hay empleados que se pueden sentir como malas personas por querer renunciar.
Es así como cada vez más empresas ofrecen un servicio personalizado a los empleados que desean renunciar pero necesitan ayuda en el proceso de dejar su trabajo.

“La mayoría le tienen miedo a sus jefes”, dijo Yuichiro Okazaki en el episodio de Ghosting at Work del programa de radio de la BBC Business Daily.

“Ellos saben que sus jefes les van a decir: ‘No, no puedes renunciar’. Creo que es por la cultura de Japón, renunciar es algo malo. Cuando quieren renunciar se sienten como una mala persona”.

En un contexto laboral en el que lo normal es trabajar para la misma empresa toda la vida para ir ascendiendo, muchos empleados se pueden sentir malas personas por querer renunciar.

Ahí es donde entran empresas que por unos US$400 llaman al jefe del cliente y entregan una renuncia por poder.

5. Cero felicitaciones
Para referirse a la retroalimentación positiva o feedback, como se le conoce en inglés, en el lenguaje tradicional japonés no existía ninguna palabra.

Nada, ningún vocablo para referirse a la opinión que un interlocutor nos da sobre algo que hacemos.

¿Por qué? Porque simplemente es algo que no se hacía.

En la tradición japonesa el “nomikai” consiste en jefes y colegas discuten asuntos de trabajo entre copas.

Por el contrario, de acuerdo con Sharon Schweitzer, directora ejecutiva de Protocol and Etiquette Worldwide y experta en la integración de directivos en países extranjeros, “si tu jefe en Japón no te dice nada, significa que lo estás haciendo bien”.

“Y si te pide una revisión del proyecto, entonces significa que no lo estás haciendo tan bien”, señaló en un reportaje de Eric Barton de BBC Capital.

Esto es algo con lo que pueden batallar ejecutivos extranjeros en Japón que, al buscar felicitar a un empleado por algo que hicieron bien pueden quedar mal y hacer quedar mal al empleado.

La mejor manera de discutir el rendimiento de alguien es una tradición japonesa que se conoce como nomikai, en la cual colegas y jefes salen a beber juntos para discutir asuntos de trabajo.

Los Tres Leones Reflexion

En la selva vivían 3 leones. Un día el mono, el representante electo por los animales, convocó a una reunión para pedirles una toma de decisión:

Todos nosotros sabemos que el león es el rey de los animales, pero para una gran duda en la selva: existen 3 leones y los 3 son muy fuertes.

¿A cuál de ellos debemos rendir obediencia? ¿Cuál de ellos deberá ser nuestro Rey?

Los leones supieron de la reunión y comentaron entre si: Es verdad, la preocupación de los animales tiene mucho sentido. Una selva no puede tener 3 reyes.

Luchar entre nosotros no queremos ya que somos muy amigos…

Necesitamos saber cual será el elegido, pero, ¿Cómo descubrirlo?.

Otra vez los animales se reunieron y después de mucho deliberar, llegaron a una decisión y se la comunicaron a los 3 leones:

Encontramos una solución muy simple para el problema, y decidimos que Uds. 3 van a escalar la Montaña Difícil.

El que llegue primero a la cima será consagrado nuestro Rey.

La Montaña Difícil era la mas alta de toda la selva. El desafío fue aceptado y todos los animales se reunieron para asistir a la gran escalada.

El primer león intentó escalar y no pudo llegar.

El segundo empezó con todas las ganas, pero, también fue derrotado.

El tercer león tampoco lo pudo conseguir y bajó derrotado.

Los animales estaban impacientes y curiosos; si los 3 fueron derrotados, ¿Cómo elegirían un rey?

En este momento, un águila, grande en edad y en sabiduría, pidió la palabra:

¡Yo sé quien debe ser el rey!

Todos los animales hicieron silencio y la miraron con gran expectativa.

¿Cómo?, Preguntaron todos.

Es simple… dijo el águila. Yo estaba volando bien cerca de ellos y cuando volvían derrotados en su escalada por la Montaña Difícil escuché lo que cada uno dijo a la Montaña.

El primer león dijo: – ¡Montaña, me has vencido!

El segundo león dijo: – ¡Montaña, me has vencido!

El tercer león dijo: – ¡Montaña, me has vencido, por ahora! Pero ya llegaste a tu tamaño final y yo todavía estoy creciendo.

La diferencia, completó el águila, es que el tercer león tuvo una actitud de vencedor cuando sintió la derrota en aquel momento, pero no desistió y quien piensa así, su persona es más grande que su problema: él es el rey de si mismo, está preparado para ser rey de los demás.

Los animales aplaudieron entusiasmadamente al tercer león que fue coronado El Rey de los animales.

Moraleja:

No tiene mucha importancia el tamaño de las dificultades o situaciones que tengas.

Tus problemas, por lo menos en la mayor parte de las veces, ya llegaron al nivel máximo, pero no tú.

Tú todavía estás creciendo y eres más grande que todos tus problemas juntos.

Todavía no llegaste al límite de tu potencial y de tu excelencia.

La Montaña de las Dificultades tiene un tamaño fijo, limitado.

¡Tu Todavía Estas Creciendo!

Desconozco su autor

¿Qué pasó el 23 de enero y por qué esta fecha también divide a gobierno y oposición en Venezuela?

El Douglas C-54 “Skymaster” levantó vuelo en torno a las 3 de la mañana del aeropuerto de la Carlota, ubicado en el corazón de Caracas. A bordo viajaban el general Marcos Pérez Jiménez, su familia y sus más cercanos colaboradores.

La aeronave tomó rumbo hacia República Dominicana. Pero este no era un viaje cualquiera. Era 23 de enero de 1958. Un día que quedaría registrado en la memoria de Venezuela.

Pérez Jiménez, quien había regido los destinos de Venezuela desde 1948, dejaba finalmente el poder y con ello terminaba su gobierno militar y se abrían las puertas para la más larga etapa democrática que ha tenido ese país.

El gobernante no marchaba voluntariamente sino, más bien, forzado por las circunstancias.

Había intentado infructuosamente mantenerse al mando pero una serie de crisis en su gobierno y en el seno de las Fuerzas Armadas confluyeron con la movilización en su contra de los partidos políticos y de la sociedad civil.

Elecciones fraudulentas
Pérez Jiménez había llegado al poder en noviembre de 1948 como parte de una junta militar que derrocó al presidente civil Rómulo Gallegos.

En 1953, se convertiría en el hombre fuerte del país tras ser electo por una cuestionada Asamblea Constituyente. Su período estaba previsto que concluyera en 1958 pero, a finales de 1957, en lugar de una elección presidencial convocó un plebiscito sobre su continuidad y resultó reelecto en un proceso no reconocido por sus opositores.

Tras la caída de Pérez Jiménez, una multitud acudió a la sede de la policía política para liberar a los presos en sus calabozos.
“Para noviembre de 1957, la dictadura parecía consolidada sin remedio. Incapaz de ganar las elecciones, había desconocido los resultados cinco años antes y ahora apelaba a un subterfugio legal para evitarlas, sustituyéndolas con un plebiscito amañado”, señaló el historiador venezolano Tomás Straka, en un discurso pronunciado ante la Asamblea Nacional el 24 de enero de 2017.

Sin embargo, de ese controvertido plebiscito surgirían gran parte de las fracturas que llevarían al final del régimen militar.

“Desde entonces, el gobierno, cuya legitimidad ya era cuestionada, se vio en mayores aprietos”, explicó Sócrates Ramírez, profesor de Historia y Lenguajes Políticos Contemporáneos de la caraqueña Universidad Simón Bolívar a BBC Mundo.

El 17 de diciembre de ese año, la Junta Patriótica, un órgano clandestino integrado por representantes de varios partidos de la oposición y que articulaba la resistencia al régimen, acusa a Pérez Jiménez de usurpación y unos días más tarde, hace un llamamiento a las Fuerzas Armadas para que cumplan su deber y velen por el acatamiento de la Constitución.

Su solicitud no cae en oídos sordos. El 1 de enero de 1958 se produce un alzamiento militar en contra de Pérez Jiménez que fracasa pero que deja en evidencia que el gobernante no cuenta con el apoyo monolítico de los militares.

La situación de inestabilidad política y las propias fracturas dentro del gobierno, pues no todos sus miembros estaban de acuerdo con la forma como Pérez Jiménez se reeligió, derivan en dos reorganizaciones del Ejecutivo, ocurridas entre el 10 y el 13 de enero.

Al saberse que Pérez Jiménez había abandonado el país, miles de personas salieron a las calles a celebrar.
Además, el descontento dentro de las Fuerzas Armadas también obliga a salir del gobierno y del país al ministro del Interior, Laureano Vallenilla Lanz, y al jefe de la policía política, Pedro Estrada.

En ese contexto, comienzan a circular manifiestos en contra del régimen procedentes de distintas organizaciones de la sociedad civil: movimientos estudiantiles, sindicatos así como muchas organizaciones gremiales y empresariales manifiestan su descontento, mientras los partidos clandestinos agitan las calles.

Entonces, la Junta Patriótica convocó para el 21 de enero una huelga general. Ese día, la jornada comenzó con un paro de la prensa y evolucionó en una protesta generalizada en numerosas ciudades del país.

Las multitudinarias manifestaciones derivaron en disturbios. Miles de personas salieron a las calles a protestar y el ministerio de Defensa emitió un comunicado advirtiendo que las tropas abrirían fuego en contra de cualquiera que atentara contra otras personas o bienes.

El gobierno decretó un toque de queda pero no logró aplacar al país.

La protesta civil pronto fue acompañada por un decisivo alzamiento militar el 22 de enero, con la sublevación de las bases navales de La Guaira y Puerto Cabello, gran parte de los cuarteles del interior del país e incluso un grupo de oficiales al mando de la Escuela Militar de Caracas. Un factor decisivo para que el gobernante decidiera abandona el poder.

“Aunque la organización partidista y la protesta popular fueron decisivas, su papel real fue el de apurar el quiebre de la lealtad de la Fuerza Armada hacia el dictador. Sólo cuando para él eso quedó revelado, huyó”, apunta Ramírez, quien asegura que lo ocurrido “puso de manifiesto una máxima del cambio político: que la organización de los oprimidos debe estar dirigida a quebrar la lealtad de quienes sustentan el poder de los opresores”.

Pero la intensa jornada dejaba no pocas secuelas.

“El fuego indiscriminado ha matado y herido a numerosas personas”, escribió en su reseña de los sucesos el diario The New York Times, que entonces estimó el número de muertes ocurridas durante esos dos días en más de un centenar.

Una fecha fundacional
A Pérez Jiménez, lo sustituyó en el poder una Junta de Gobierno provisional que integró en su seno a militares y civiles, liberó a los presos políticos, permitió el regreso de los exiliados y convocó elecciones democráticas.

Con Rómulo Betancourt como presidente, Venezuela estrenó su sistema de democracia representativa.
“El 23 de enero de 1958 ha quedado grabado en nuestra memoria política como el momento fundacional de la democracia venezolana”, señala Ramírez.

El experto indicó que la fecha también tiene gran importancia debido a que sobre los sucesos de aquella fecha “se ha construido el relato heroico de un pueblo capaz de derrocar a un mal gobierno, y eso ha quedado estampado como un símbolo en la subjetividad venezolana”.

En su discurso ante la Asamblea Nacional (Parlamento), Straka se refirió al 23 de enero como “un triunfo colectivo”, lo que desde su punto de vista constituye una lección fundamental para los venezolanos.

“Ahí estaban casi todos. Los comunistas, que tanta sangre derramaron en la Resistencia; la Iglesia y los sindicatos; los empresarios y los intelectuales; los socialcristianos y los militares”, apuntó.

Celebración dividida
Pero no todos los venezolanos coinciden en ver el 23 de enero de 1958 con la misma óptica.

Hugo Chávez aseguraba que luego del 23 de enero de 1958 se había instaurado otra dictadura en Venezuela.
Historiadores como Straka apuntan que “el espíritu del 23 de enero fue la cuna del espíritu de Punto Fijo”, el acuerdo de gobernabilidad suscrito en 1958 entre los partidos políticos venezolanos AD, Copei y URD, que fue la base para la existencia de un sistema de democracia representativa que se mantuvo en pie hasta 1998.

Sin embargo, hay visiones muy críticas con lo que vino después de la caída de Pérez Jiménez.

Pese a haber sido una pieza fundamental en el combate al régimen de Pérez Jiménez, el Partido Comunista de Venezuela fue excluido del Pacto de Punto Fijo, al que desde entonces tacharon como un acuerdo de élites contrario a los intereses del pueblo.

Esa retórica se mantuvo durante décadas y fue heredada por el movimiento político liderado por el fallecido presidente Hugo Chávez, quien llegó a afirmar que el Pacto de Punto Fijo fue “la última dictadura” que hubo en Venezuela y quien durante sus primeros años de gobierno se mostró reacio a celebrar el 23 de enero.

En la acera contraria, la actual oposición venezolana no solamente ha seguido conmemorando el 23 de enero como una fecha patria sino que lo ha incorporado como parte de su discurso político en su enfrentamiento contra el chavismo, en el gobierno desde 1998.

El opositor Juan Guaidó convocó a manifestar este 23 de enero en contra del gobierno de Nicolás Maduro.
En los últimos años, chavismo y oposición han reivindicado la fecha desde perspectivas diversas, algo que se repite este miércoles cuando cada grupo saldrá a celebrar una misma fiesta pero con discursos completamente antagónicos.

Así, el presidente de la oficialista Asamblea Nacional Constituyente, Diosdado Cabello, anunció este martes que se manifestarán para “defender la Revolución Bolivariana y al presidente de la República, Nicolás Maduro”.

Mientras tanto, desde la opositora Asamblea Nacional, su presidente Juan Guaidó, ha convocado a la movilización como un paso para “retomar el orden constitucional” que, en su opinión, ha sido quebrantado con la juramentación de Maduro para un segundo mandato, para el que resultó electo en mayo de 2018 en unos comicios considerados como fraudulentos por sus adversarios así como por numerosos gobiernos de América Latina.

61 años más tarde, la celebración del 23 de enero de 1958 no parece dejar indiferentes a los venezolanos, aunque se movilicen por calles divididas.

Fuente: www.bbc.com

Miles de personas participan en manifestaciones masivas contra el gobierno de Maduro que ya dejaron 4 muertos

Miles de personas participan este miércoles en Venezuela en masivas movilizaciones convocadas por la oposición contra el gobierno del presidente Nicolás Maduro, y en cuya víspera murieron cuatro personas.

Según informó el Observatorio Venezolano de Conflictividad Social, un joven de 16 años perdió la vida en Caracas en la noche del martes por una herida causada con arma de fuego mientras participaba en una manifestación convocada en una zona de clase trabajadora en Caracas.

Por su parte, la policía informó de la muerte de otras tres personas durante unos intentos de saqueos en Ciudad Bolívar, en el sureste del país.

Al mediodía de este miércoles, miles de manifestantes de la oposición se habían concentrado en las principales ciudades de Venezuela para participar en una protesta convocada por el presidente de la Asamblea Nacional (AN), Juan Guaidó, controlada por la oposición desde 2016.

Miles de manifestantes se concentraron este miércoles convocados por la Asamblea Nacional controlada por la oposición.
La manifestación coincide con la conmemoración del 61 aniversario del 23 de enero de 1958, cuando se produjo el derrocamiento del general Marcos Pérez Jiménez, quien encabezó el último gobierno militar que tuvo Venezuela.

La movilización busca mostrar respaldo a la propuesta de Guaidó de impulsar el establecimiento de un gobierno de transición que convoque a nuevas elecciones.

El oficialismo venezolano también organizó manifestaciones con motivo del 23 de enero pero, según explicó Diosdado Cabello, presidente de la Asamblea Constituyente y considerado como el número dos del chavismo, su objetivo es “defender la Revolución Bolivariana y al presidente de la República, Nicolás Maduro”.

Fuente: www.bbc.com