Cuenca –
El funcionamiento del tranvía no tiene fecha de inicio. La administración saliente ofreció que ocurriría en marzo pasado, pero finalmente serán el alcalde y los concejales que entrarán en funciones el martes 14 los que definan qué pasará con el sistema de transporte más caro de la historia de Cuenca.
Una vez que la obra civil finalizó con un retraso de tres años, el alcalde Marcelo Cabrera ofreció que el 2 de marzo pasado iniciaría la operación comercial. Ello no se cumplió.
Para el alcalde electo, Pedro Palacios, el tema no avanza por indefinición en el precio de la tarifa, la integración con otros medios de transporte, los contratos de mantenimiento, protocolos de seguridad o recepción definitiva de las obras.
Advirtió que no será un tema fácil de cumplir en su mandato porque “en cinco años la administración no ha logrado cumplir con ciertos temas”, y de todos los aspectos pendientes lo que más le preocupa es que no está listo para operar.
Además de todos estos temas el director del proyecto, Jaime Guzmán, reveló uno adicional. Hasta el momento las licencias de los conductores escogidos aún no han sido revalidadas por las autoridades. Se requiere una de categoría E, que faculta a manejar vehículos pesados o extrapesados con un peso superior a las 3,5 toneladas, pero los conductores, según dijo, tienen la C y la D utilizadas para transporte de pasajeros.
Añadió que se han hecho las gestiones ante las autoridades correspondientes, pero no han obtenido una respuesta.
En cuanto al costo final, Guzmán aseguró, sin total certeza, que este subirá de $ 232 millones a $ 289 millones, pero que habría que sumar “pagos” y “cosas adicionales”, por lo que estimó que el costo llegaría a los $300 millones. Calmado, aseguró que los costos iniciales no habían “variado mucho, aunque parezca una barbaridad”.
Justificó esta alza al decir que es un proyecto complejo con una cantidad enorme de ítems y subsistemas.
Aunque hay el plan de unificar el sistema de buses con el tranvía, Guzmán indicó que el diseño original fue concebido para que sea independiente.
Para esto son necesarios cuatro aspectos: acuerdo entre Municipio y transportistas, definir cuadros tarifarios con diversas opciones, un sistema de recaudo fácil de operar y contar con una cámara de compensación donde todos los fondos vayan al transporte público.
El alcalde entrante Palacios dijo que “le extrañaba” oír a funcionarios municipales decir que el tranvía estaba listo para que él lo inaugure. Replicó que ni siquiera la obra es recibida legal y técnicamente.
El sistema tranvía debía de haber sido entregado el 25 de noviembre del 2015, según la planificación inicial.
Fuente: www.eluniverso.com