Ambato –
Esther Quinde, presidenta de la asociación Ñuka Llakta, junto con Luz Llumitásig, de la asociación Nueva Generación, y María Santos de La Salle desde hace dos años comenzaron a gestionar ayuda para trabajar varios proyectos que fortalezcan las tradiciones ancestrales para que estas no se pierdan.
El apoyo lo consiguieron a través de la fundación Humana, cuyos proyectos de producción agrícola aspiran a reducir la migración desde Quisapincha y la violencia contra de la mujer.
Las promotoras aseguran que otro de los objetivos sería la práctica del kichwa, idioma que aseguran se estaría perdiendo.
“Queremos volver a valorarlo, también esperamos recuperar el uso de la vestimenta autóctona”, dijo Llumitásig.
Por su parte, Santos comentó que tampoco quieren olvidar el cultivo de productos ancestrales como la mashua, la oca, la quinua y todos los granos andinos. Ella aseguró que van a trabajar en el cultivo orgánico de estos alimentos que mantenían sanos a sus ancestros.
Montalvo aseguró que el fomento del rescate de la cultura autóctona viene desde la agricultura y dijo haber identificado con la comunidad algunos tubérculos andinos y plantas medicinales que se podrán cultivar e industrializar para su futura comercialización. (I)
Fuente: www.eluniverso.com