Los restos del expresidente Joao Goulart de Brasil están siendo exhumados para ser sometidos a análisis tras las sospechas de que fue asesinado bajo órdenes de la junta militar que lo derrocó en 1964.
Los militares gobernaron ese país latinoamericano durante 21 años. Goulart se había exiliado en Argentina, donde murió en 1976 y fue enterrado en Sao Borja, 600 kilómetros al occidente de Porto Alegre, en el sur de Brasil.
La causa de de su muerte fue dada como un ataque cardíaco, pero el Ministerio de Derechos Humanos de Brasil dice sospechar que fue envenenado.
Agentes de las dictaduras que gobernaron varios países en Sudamérica, entre los años 70 y 80, han sido acusados de haber cooperado entre ellos en torturas y desapariciones de sus ciudadanos.