San Vicente –
Voluntarios de la organización italiana CISP y técnicos de la municipalidad de San Vicente, Manabí, iniciaron desde esta semana la construcción de soluciones habitacionales para quienes perdieron sus casas en el terremoto de magnitud 7,8 en la escala de Richter que azotó al país hace un año.
Ese trabajo se ejecuta en comunidades como Muyuyal, Puerto Cabuyal, Río Muchacho y Tabuchila. Se construyen doce casas destinadas a los más vulnerables, como personas con discapacidad, adultos mayores, embarazadas, madres adolescentes, entre otros.
El proceso se ejecuta bajo la supervisión técnica de docentes de la carrera de Arquitectura de la Universidad Laica.
Luis Farías, responsable del área de Obras Publicas del Cabildo de San Vicente, indicó que los cimientos son de concreto y se utilizan materiales como caña y madera.
La distribución de las viviendas tiene un dormitorio, sala, comedor, cocina y un baño.
Rosita Cedeño, una de las beneficiarias, dijo sentirse agradecida con esta iniciativa que se suma a los planes gubernamentales de reconstrucción en las zonas afectadas por el sismo.
En la comuna Libertador Bolívar, provincia de Santa Elena, familias como la de Fresia Lino y doce más también fueron beneficiadas con casas de caña.
Estas fueron construidas por iniciativa del presidente de la comuna, Luis Coronado, la fundación estadounidense Heifer y voluntarios holandeses