“Japón no es un país muy grande. Pero es un país caro”.
Así es como East Japan Railway Company, la empresa japonesa detrás de la fabricación de Shiki-shima, el tren más lujoso de la nación asiática, presenta en su sitio web su nuevo ferrocarril de lujo, cuyos pasajes cuestan entre US$2.860 y US$10.000.
Pero su exorbitante precio no es lo único que lo hace diferente.
“Queremos que nuestros clientes sientan el placer de darse cuenta que hay cosas que aún no conocen. Desde la vitalidad de cada estación hasta nuevas experiencias y descubrimientos en el camino”, explica la compañía.
El nuevo tren japonés ha sido diseñado para proporcionar a sus pasajeros una experiencia de lujo suprema.
Su nombre en español significa “isla de las cuatro estaciones”, en referencia a los marcados cambios estacionales del archipiélago nipón.
El ferrocarril, con capacidad para 34 pasajeros (o 17 parejas) hizo su trayecto inaugural el 1 de mayo.
Y la demanda es tan alta que ya se han agotado los billetes (hasta marzo de 2018).
Interior del trenDerechos de autor de la imagenJR EAST
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El Shiki-shima hizo su viaje inaugural el 1 de mayo. Recorre todo Japón: desde Tokio hasta la isla de Hokkaido.
Su futurista aspecto es obra de Ken Kiyoyuki Okuyama, exdiseñador de Ferrari.
Su diseño es obra deKen Kiyoyuki Okuyama, un reconocido exdiseñador de Ferrari que decoró los interiores del Shiki-shima con baños de mármol, ventanales vidriados, paneles de madera y formas artísticas, usando materiales exclusivos ligados a la artesanía japonesa tradicional.
En sus futuristas “vagones de observación” puedes relajarte y tomar una copa de champaña mientras disfrutas de los maravillosos escenarios naturales que ofrece Japón.
El tren hace trayectos desde Tokio hasta la isla de Hokkaido y puedes dormir a bordo entre una y tres noches.
Cuenta con 10 vagones: dos de observación (en los extremos, con vistas más amplias), cinco dormitorios (suites) de dos pisos, una sala de estar, un comedor y una suite de lujo.
Hay espacio para 34 pasajeros.
Puedes dormir a bordo del tren entre una y tres noches.
Paladares exquisitos
Más que un tren, el Shiki-shima es un hotel de lujo en movimiento.
Uno de sus mayores atractivos es su oferta gastronómica, pensada para los paladares más exquisitos.
La comida dentro del tren es preparada por chefs con estrellas Michelin y presentada por camareros uniformados.
En su interior cuenta con un restaurante de lujo.
Katsuhiro Nakamura, director y gran chef honorario de Nippon Hotel (en Tokio), es quien se encarga del menú.
Fue el primer japonés en recibir una estrella Michelin y ha trabajado en restaurantes de alta categoría en Francia y en Japón.
El diseño de los uniformes del personal es obra de Naoki Takizawa, quien también trabaja para la cadena de ropa japonesa Uniqlo.
Los platos son preparados por chefs de alta categoría.
El tren cuenta con una amplia sala de estar cuyas paredes de diseño “evocan la imagen de un tranquilo bosque” y en las que se pueden apreciar “toques de varias técnicas artísticas que han formado parte de la cultura japonesa oriental por generaciones”.
“Estas exquisitas aportaciones de diseño japonés proporcionarán excelentes temas de conversación cuando conozcas a otros pasajeros durante el trayecto”, asegura la empresa ferroviaria.
Por supuesto, el comedor es una zona vital.
“Ninguna experiencia de viaje es completa sin comida fabulosa con los mejores ingredientes”, se lee en el sitio web de Shiki-shima.
“El apacible sonido del tren y las vistas desde la ventana proporcionan un contexto fabuloso para la elegancia del comedor. No te pierdas esta increíble experiencia”.
Las paredes del tren incluyen diseños artísticos japoneses.
Los viajeros pueden elegir entre compartimentos suite o superior. Cada uno de ellos tiene su propia ducha, fabricada con madera aromática de ciprés japonés. Una de las habitaciones está pensada para personas con movimiento reducido.
East Japan Railway Company anunció sus planes para la creación del tren en 2014 y lanzó un sorteo cuya participación se disparó hasta 76 veces más de lo esperado.
Y es que viajar en un tren de lujo no está al alcance de cualquiera, pero son muchos los que sueñan con subirse a bordo.
Los billetes están agotados hasta marzo de 2018.