Por qué a los habitantes de Costa Rica les dicen ticos (y catrachos, chapines, guanacos y nicas a sus vecinos centroamericanos)

Esta nota fue originalmente publicada el 15 de mayo del 2019.

Si entablas amistad con un tico, es probable que tarde o temprano escuches una de sus frases más características: “¡Pura vida, mae!”.

Es fácil descubrir que estamos hablando de alguien de Costa Rica, ¿cierto? Aunque probablemente la pista no te hiciera falta, ya que “tico” es uno de los nombres coloquiales más populares para referirse a la población de este país de Centroamérica.

Y no es el único. En esta región, hay muchas otras formas (además del gentilicio oficial) para referirse a nicaragüenses, guatemaltecos, hondureños…

Hablamos de hipocorísticos, una designación generalmente cariñosa para referirse a los nacidos en un lugar.

Algunos de estos nombres son del agrado de los habitantes de estos países centroamericanos, otros no tanto. De algunos se conoce su origen con exactitud y de otros existen multitud de teorías.

En BBC Mundo repasamos, país por país, algunos de ellos.

Costa Rica: ticos
El popular ticoprocede de la extendida costumbre entre los costarricenses de utilizar el sufijo “ico” o “ica” como diminutivo al hablar.

Por ello, es habitual escuchar en el país palabras como “momentico”, “fotico” o “patico” (en lugar de “momentito”, “fotito” o “patito”) como formas más coloquiales y generalmente cariñosas.

El sufijo “ico” se utiliza también en zonas de otros países de Centroamérica y el Caribe e incluso en comunidades de España como Navarra y Aragón, pero en Costa Rica es sin duda una seña de identidad propia.
Y aunque no está claro cuándo se comenzó a popularizar el gentilicio “ticos”, una de las teorías más extendidas afirma que fue en la Guerra Patria Centroamericana (1856-1857) contra los filibusteros de William Walker.

Durante este conflicto, los ejércitos de otros países se percataron de la frecuencia con que los soldados costarricenses utilizaban la fórmula “ico” al hablar (como cuando decían “hermaniticos” para referirse a sus compatriotas) y acabaron llamándolos “ticos”.

De este mismo gentilicio viene Tiquicia (propio de / relacionado con los ticos), la forma coloquial con la que sus habitantes se refieren a Costa Rica.

Honduras: catrachos
Curiosamente es en el mismo conflicto, la Guerra Patria Centroamericana, en el que se enmarca el origen del nombre coloquial más popular para llamar a los hondureños.

El general Florencio Xatruch fue quien lideró a los cientos de soldados hondureños que participaron en esta guerra contra los filibusteros que pretendían restablecer el esclavismo en Nicaragua, con la intención de extenderlo después a toda Centroamérica.

Sus tropas eran conocidas popularmente como “xatruches” o “xatruchos”, pero la palabra era difícil de pronunciar para muchos y el término se fue modificando en el habla hasta llegar al “catrachos”actual.

La trayectoria de Xatruch, considerado por muchos como un héroe por contribuir a la victoria centroamericana y llegar a la presidencia de Honduras de manera fugaz en 1871, hace quelos hondureños utilicen con orgullo esta palabra para referirse a ellos mismos.

“No hay otro pueblo más macho que el pueblo catracho”, dice un popular lema utilizado en el país extraído de la letra de una tradicional canción llamada “Corrido a Honduras”.

Su artífice, el artista Tino López, sin embargo, no era catracho sino nicaragüense.

El Salvador: guanacos
No goza de la misma aceptación unánime en El Salvador la manera coloquial de referirse a sus habitantes, probablemente debido a las versiones muy diferentes que existen sobre su origen.

Uno de ellos tiene que ver con el mamífero de este nombre, un miembro de la familia de los camélidos (al igual que las alpacas y llamas) nativo de Los Andes.

Pero su lejanía respecto a El Salvador dificultaría que el animal fuera conocido ya hace siglos en Centroamérica, lo que hace que varios expertos no apoyen esta teoría.

Lo cierto es que este animal es lento y no muy ágil, y ello molesta a algunos salvadoreños por la comparación.

Otros, en cambio, subrayan la capacidad del guanaco de soportar grandes cargas en largas distancias para destacar así su fama de personas trabajadoras.

Otra teoría más respaldada por historiadores apunta a la época anterior a la llegada de los españoles, cuando grupos indígenas celebraban reuniones de fraternidad llamadas huanacax en el actual territorio de El Salvador.

Los encuentros se hacían bajo grandes árboles que hoy en día conocemos comoguanacastes (del náhuatl huanacaxtle), también llamados conocastes, entre muchos otros nombres).

Y, por este motivo, a los habitantes de aquellas tierras se les habría terminado llamando guanacos.

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Otra teoría apunta a Guanahaní, la primera isla de las Antillas en la que desembarcó Colón cuando llegó a América y que él rebautizó como San Salvador.

Cuando el conquistador Pedro de Alvarado también rebautizó a Cuscatlán como San Salvador, los habitantes de esta nueva ciudad habrían sido llamados con el mismo gentilicio de guanahicos, que evolucionaría después a guanacos.

Otras teorías apuntan al uso que en el siglo XIX se hacía en Guatemala del término guanaco para referirse con cierto tono despectivo a quienes no vivían en la ciudad, o incluso a los originarios del resto de países de Centroamérica.

Otro gentilicio coloquial aunque menos conocido para los salvadoreños es cuzcatlecos, como se denominaban a los habitantes del antiguo señorío de Cuscatlán, cuyo territorio abarcaba el centro y oeste de El Salvador hasta ser conquistado por los españoles en el siglo XVI.

Guatemala: chapines
¿Y por qué a los guatemaltecos se les conoce popularmente como chapines?

Así se llamaban unos zapatos con grandes plataformas o tacones que se popularizaron entre las mujeres de clase alta en la España del siglo XVI. Su nombre proviene del ruido que hacían al utilizarlos sobre calles empedradas (chap, chap, chap…).

Con la colonia, este calzado llegó también a Guatemala de mano de los españoles, a quienes se empezó a identificar con cierta sorna como chapines.

La Capitanía General de Guatemala fue durante siglos la que controlaba el comercio y otras actividades económicas de los territorios centroamericanos, lo que despertó recelos en la región ante el poder y centralismo impuesto por los chapines.

Tras la independencia, sin embargo, los nacidos en Guatemala de padres españoles adoptaron y preservaron el gentilicio con orgullo, pues en cierta forma reflejaba el estatus y categoría social que habían mantenido durante tantos años.

Con el tiempo, la palabra chapín dejó de referirse al privilegio de las clases más acomodadas para convertirse en orgullo de cualquier guatemalteco.

Nicaragua: nicas, nicoyas, pinoleros, mucos y chochos
Nicaragua es sin duda el país centroamericano con mayores apodos coloquiales para sus habitantes.

Nica, apócope de nicaragüense, es la forma más utilizada tanto dentro como fuera del país.

Los nicas también se llaman a sí mismos pinoleros (que proviene del pinol, una popular bebida hecha a base de maíz) o nicoyas (derivado del término nicas y con posible referencia a la península del mismo nombre, hoy parte de Costa Rica pero que perteneció a Nicaragua hasta el siglo XIX).

Pero hay otros nombres que, aunque no son populares dentro de Nicaragua, sí son utilizados por los países vecinos para referirse a los nicas.

Es el caso de mucos (el animal al que le falta un cuerno o parte de los cuernos y que se aplica a los nicas por su costumbre de no pronunciar la “s” final de las palabras) o chochos, una palabra muy utilizada en Nicaragua para expresar sorpresa o asombro.

Panamá: istmeños
Panamá también muestra en este aspecto sus diferencias respecto al resto de Centroamérica ya que, sin duda, es el país de la región donde el gentilicio más popular es el oficial: simplemente, panameños.

Si hubiera que destacar otra forma de denominar a su población, sería probablemente istmeños, en referencia al estrecho “puente de tierra” que forma su territorio y que conecta América del sur con el resto del continente.

Sin ir más lejos, el himno nacional de Panamá uno de sus mayores símbolos patrios, se llama “Himno istmeño”.

Otra manera algo popular de referirse a los panameños es mediante el término panas, si bien esta forma suele ser utilizada por algunos extranjeros que viven en el país y nunca por la población local.

Fuente: www.bbc.com

Cómo identificar los alimentos que parecen saludables pero no lo son

No todo es lo que parece. Esta máxima vale para muchas cosas, incluso para la alimentación, ya que diversos productos que aparentan ser saludables no siempre lo son.

Algunos ejemplos clásicos son las barras de cereal, los cereales para desayuno, los jugos preparados, las barras de pan —incluidas las integrales—, los yogures —excepto los naturales—, la gelatina y el fiambre de pechuga de pavo.

En varios menús estos y otros alimentos se presentan como “nutritivos”, pero en realidad entran en una categoría alimentaria peligrosa que ni siquiera existía hasta hace poco:la de los ultraprocesados.

Esta categoría empezó a ser considerada en 2014, con la publicación de la segunda edición de la Guía Alimentaria para la Población Brasileña del Ministerio de Salud y adoptada en el sistema de clasificación alimentaria NOVA, elaborado por el Núcleo de Investigaciones Epidemiológicas en Nutrición y Salud (Nupens), de la Universidad de Sao Paulo (USP), de Brasil.

Este sistema agrupa los alimentos en cuatro categorías, definidas de acuerdo con la extensión y el propósito del procesamiento industrial utilizado en su producción, y son: naturales o mínimamente procesados, ingredientes culinarios, procesados y ultraprocesados.

Antes de esto, explica María Laura Louzada, investigadora de Nupens y profesora del Departamento de Políticas Públicas y Salud Colectiva de la Universidad Federal de Sao Paulo (Unifesp), los alimentos se dividían según su perfil de nutrientes (proteínas, carbohidratos, grasas, vitaminas y minerales).

La especialista cuenta que en 2009 surgió una propuesta para agruparlos conforme a su procesamiento industrial.

“Esto se dio después de analizar los datos de la Encuesta de Presupuestos Familiares realizada por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE), desde la década de 1970, para evaluar el consumo de la población”, dice.

Lo que la entidad observó fue que cada año las familias brasileñas compraban menos azúcar refinada, sal y aceite, pero que, a pesar de ello, la composición nutricional de lo que colocaban en su plato mostraba un aumento en la cantidad de estos productos, considerados hasta entonces los grandes villanos de la salud y los responsables del aumento en la obesidad y las enfermedades crónico-degenerativas como el infarto agudo de miocardio y la hipertensión arterial.

“A partir de allí percibimos que el problema no eran exactamente el azúcar, la sal y la grasa, sino lo que se estaba consumiendo”, apunta Louzada. “Constatamos que la gente estaba dejando de preparar alimentos naturales y mínimamente procesados y comprando más productos listos para consumirse”, agrega.

La gran cuestión, señala, es que estos productos, en especial los ultraprocesados, contienen más calorías y más sal, azúcar y grasa, además de una serie de aditivos alimentarios (reguladores de acidez, estabilizantes, espesantes, antioxidantes, saborizantes, aromatizantes, colorantes, conservantes, emulsionantes y productos químicos, entre otros), que favorecen el consumo exagerado y provocan efectos negativos en el cuerpo y la salud.

Paula Johns, directora ejecutiva de la organización ACT Promoción de la Salud, comenta que, en el caso exclusivo de los ultraprocesados, ya hay un robusto conjunto de evidencias sobre sus efectos nocivos.

“Estos alimentos, que por cierto no deberían ser llamados alimentos sino productos comestibles ultraprocesados, no contienen ningún nutriente, no sacian y sólo nos hacen querer comer cada vez más”, indica.

Clasificación de alimentos
Los alimentos considerados naturales son aquellos que se obtienen directamente de las plantas (frutas, legumbres, verduras, raíces y tubérculos) o de animales (huevos) y que se adquieren para consumo sin que hayan sufrido alteraciones desde que se originaron en la naturaleza.

Los mínimamente procesados son los que han sido sometidos a pequeños procesos como limpieza o remoción de partes no comestibles o indeseables, refrigeración, secado, pasteurización, congelamiento y fermentación, pero a los que no se les ha añadido sal, azúcar, grasas y otras sustancias.

Entre estos están los granos y cereales, las oleaginosas, la leche, las harinas, la carne y el café.

Según la Guía Alimentaria para la Población Brasileña, estos alimentos “son la base para una alimentación nutricionalmente balanceada, culturalmente apropiada y promotora de un sistema alimentario social y ambientalmente sostenible”.

Ingredientes culinarios
En esta categoría se incluyen los aceites vegetales, las grasas, la sal y el azúcar, todos ellos extraídos de alimentos de la naturaleza por procesos como prensado, molienda, trituración, pulverización y refinación. Son responsables de diversificar y hacer la alimentación más sabrosa, sin que quede nutricionalmente desequilibra.

Algunos ejemplos de aceites vegetales son el de soya, maíz, girasol y oliva; la grasa puede ser mantequilla, manteca de cerdo y grasa de coco; y el azúcar blanco, demerara o moreno, y la sal refinada o gruesa.

Es importante destacar que estos elementos deben ser usados ​​en pequeñas cantidades para condimentar y cocinar alimentos y crear preparaciones culinarias basadas en alimentos naturales o mínimamente procesados.

Alimentos procesados
Cuando a un alimento natural o mínimamente procesado se le agrega sal, azúcar u otra sustancia de uso culinario, para hacerlo duradero y más agradable al paladar, pasa a ser considerado procesado.

Según el Ministerio de Salud de Brasil y el Nupens, a este tipo de producto deriva directamente de alimentos se le reconoce como versión modificada, y usualmente es consumido como parte o acompañamiento de preparaciones culinarias hechas a base de alimentos mínimamente procesados.

Algunos ejemplos son la zanahoria, el pepino, los guisantes, el palmito, la cebolla y la coliflor preservados en salmuera o en solución de sal y vinagre; el extracto o concentrado de tomate (con sal y azúcar); las frutas cristalizadas; la carne seca y el tocino; las sardinas y el atún enlatados; los quesos y los panes hechos de harina de trigo, levaduras, agua y sal.

Las entidades comentan que las técnicas de procesamiento se asemejan a las culinarias, lo que puede incluir cocción, secado fermentación, acondicionamiento en latas o vidrios y uso de métodos de preservación, como salazón, salmuera, curación y ahumado.

Y recomiendan que se limite la ingestión de estos alimentos, pues los ingredientes y los métodos usados en la fabricación alteran de modo desfavorable la composición nutricional.

Alimentos ultraprocesados
El término ultraprocesado se usa para las formulaciones producidas con muchos elementos, como sal, azúcar, aceites, grasas y sustancias de uso exclusivamente industrial, como proteínas de soya y de leche y extractos de carnes, y que pasan por varias etapas de procesamiento.

Estas formulaciones también suelen utilizar sustancias sintetizadas en laboratorio a partir de alimentos y otras fuentes orgánicas, como petróleo y carbón, y muchas de estas actúan como aditivos, cuya función es extender la duración o dar al producto color, sabor, aroma y textura para hacerlo más atractivo.

Una sugerencia para saber si el alimento forma parte de este grupoes consultar la lista de ingredientes en la etiqueta. Los principales indicativos son: número elevado de ingredientes (cinco o más), con nombres poco familiares y que no se utilizan en las preparaciones culinarias, como grasa vegetal hidrogenada, aceites interesterificados y jarabe de fructosa.

En esta categoría se incluyen una serie de productos: galletas, helados, golosinas en general, cereales azucarados, pasteles y mezclas para pastel, barras de cereal, sopas, macarrones y condimentos instantáneos, salsas, refrescos, bebidas lácteas, yogur endulzado y aromatizado, productos congelados, extractos de carne de pollo o pescado empanados del tipo nuggets, salchichas de paquete y otros embutidos, barras de pan y pan para hamburguesa y hot dog o perrito caliente.

La Guía Alimentaria para la Población Brasileña indica que se evite esos alimentos por la composición nutricional desequilibrada, porque están vinculados a la ingestión excesiva de calorías y por el impacto que las formas de producción, distribución, comercialización y consumo tienen sobre la cultura, la vida social y el medio ambiente.

El documento destaca que “el problema principal con alimentos ultraprocesados ​​reformulados es el riesgo de ser vistos como productos saludables, cuyo consumo ya no tendría que ser limitado”. Esto es porque la publicidad explora sus supuestas ventajas frente a los alimentos regulares, como “menos calorías” y “adición de vitaminas y minerales”.

Riesgos de los alimentos ultraprocesados
Con el aumento en el consumo de los alimentos ultraprocesados ​​en todo el mundo —sólo en Brasil, entre 1996 y 2009, según el Nupens, la participación en la dieta de la población subió del 18,7% al 30%—, se han realizado varios estudios para identificar los riesgos reales para la salud.

Entre los más recientes está uno publicado en mayo de 2019 por la Universidad de Navarra, en España. Se realizó con 19.899 voluntarios durante 15 años (de 1999 a 2014), constató que consumir más de cuatro porciones diarias de alimentos ultraprocesados ​​está asociado a 62% más probabilidades de todas las causas de mortalidad. Y con cada porción adicional, ese índice sube un 18%.

Otro estudio divulgado ese mismo mes, realizado por los Institutos Nacionales de Salud (NIH) de Estados Unidos, mostró una relación entre el consumo de este tipo de alimento y una mayor ingestión calórica y aumento de peso.

Para la investigación los científicos evaluaron a 20 personas durante cuatro semanas. En ese período fueron sometidas a dos tipos de dietas, ultraprocesada y no procesada, ambas con cantidades iguales de nutrientes.

Al final del experimento se concluyó que el grupo de la dieta ultraprocesada consumió 508 calorías más cada día, comparado con la dieta no procesada, y aumentaron casi un kilo en 15 días.

Por último, un trabajo de la Universidad de París, Francia, reforzó el vínculo entre la ingestión de ultraprocesados ​​con el riesgo elevado de desarrollar enfermedades cardiovasculares.

Después de evaluar a 105.159 individuos durante cinco años, los investigadores descubrieron que una inclusión de apenas 10% de estos alimentos en la dieta aumenta 12% la probabilidad de infarto y 11% la de accidente cerebrovascular (ACV).

Fuente: www.bbc.com

LA MALETA del Hombre Muerto Reflexion

Un hombre murió, al darse cuenta vio que se acercaba Dios y que llevaba una maleta consigo.

Dios le dijo:
_ Bien hijo es hora de irnos.

El hombre asombrado preguntó:
_ Ya? Tan pronto? Tenía muchos planes….
_ Lo siento pero es el momento de tu partida.
_ Qué traes en la maleta? preguntó el hombre …

Y Dios le respondió:
_ Tus pertenencias!!! …
_ Mis pertenencias??
_ Traes mis cosas, mi ropa, mi dinero?

 

Dios le respondió:
_ Eso nunca te perteneció, eran de la tierra.
_ Traes mis recuerdos?
_ Esos nunca te pertenecieron, eran del tiempo.
_ Traes mis talentos?
_ Esos no te pertenecieron, eran de las circunstancias.
_ Traes a mis familiares y amigos?
_ Lo siento, ellos nunca te pertenecieron, eran del camino.
_ Traes a mi mujer y a mis hijos?
_ Ellos nunca te pertenecieron, eran de tu corazón.
_ Traes mi cuerpo?
_ Nunca te perteneció, ese era del polvo.
_ Entonces traes mi alma?
_ No! Esa es mía.

Entonces el hombre lleno de miedo, le arrebató a Dios la maleta y al abrirla se dio cuenta que estaba vacía…..

Con una lágrima de desamparo brotando de sus ojos, el hombre dijo:
_ Nunca tuve nada?
_ Así es, cada uno de los momentos que viviste fueron sólo tuyos.
_ La vida es sólo un momento… !!
Un momento tuyo!!!

Por eso, mientras estés a tiempo disfrútala en su totalidad.
_ Que nada de lo que crees que te pertenece te detenga….

_ Vive el ahora.!!

_ Vive tu vida..!!!

_ No te olvides de SER FELIZ, es lo único que realmente vale la pena!

_ Las cosas materiales y todo lo demás por lo que luchaste, se quedan aquí !

_ NO TE LLEVAS NADA!

Valora a quienes te valoran, no pierdas el tiempo con alguien que no tiene tiempo para ti.

_ Regala y comparte esta hermosa reflexión a todos los que quieras en este mundo y disfruta cada segundo que vivas.

DIOS TE BENDIGA!!!

La Guerra del Fútbol: Honduras vs El Salvador, el partido que detonó una conflicto que dejó más de 3.000 muertos hace 50 años

En 1969, durante cuatro días, El Salvador y Honduras se enfrentaron en un conflicto que dejó miles de personas muertas y muchas más desplazadas.

Y se llamó “La Guerra del Fútbol”.

Tras 90 minutos en el estadio Azteca de Ciudad de México, el partido iba 2-2. Era el tercer encuentro entre Honduras y El Salvador en menos de tres semanas.

La razón era simple, pero a la vez enorme: ambas selecciones se disputaban un cupo para el Mundial de México 70. Ninguna de las dos había estado jamás en un Mundial.

Honduras había ganado el primer partido 1-0 en Tegucigalpa. El Salvador había ganado el partido de vuelta, 3-0 y de local. Brotes de violencia se habían reportado en ambos partidos.

Así las cosas, el empate obligaba a jugar dos extratiempos. Y en el minuto 11 del primer período suplementario, Mauricio “Pipo” Rodríguez, un delantero salvadoreño, convirtió el gol de la victoria en el arco que protegía Jaime Varela.

“Cuando marqué el gol, pensé que ellos no tenían la menor opción de empatarnos”, le contó Rodríguez a la BBC, cuando se cumplen 50 años de aquel partido crítico.

“Estaba seguro de que con ese gol ganábamos“, añadió.

Finalmente, El Salvador se quedó con la victoria.

A las tres semanas, ambos países estaban en guerra.

El Salvador, que es el país más pequeño de Centroamérica, tenía una población cercana a los 3 millones de habitantes en 1969. La mayor parte del país estaba controlado por una élite de terratenientes ricos que había dejado poco espacio para los campesinos pobres.

Honduras, por su parte, aunque también estaba dominado por una élite similar, tiene cinco veces el tamaño de El Salvador y en ese momento apenas contaba con 2,3 millones de habitantes.

Debido a esto, durante gran parte del siglo XX, miles de salvadoreños se habían mudado a Honduras con la idea de aprovechar esa tierra disponible y también para trabajar en compañías estadounidenses que operaban en el país.

Cerca de 300.000 salvadoreños estaban viviendo en Honduras en el momento en que comenzó el conflicto.

En gran medida, esta guerra tuvo que ver con la tierra disponible, demasiada gente en un lugar demasiado pequeño”
Dan Hagedorn
Autor “Cien horas de guerra”
Esa élite salvadoreña había promovido la migración masiva, para así aliviar la presión sobre la posesión de la tierra y los llamados para hacer una redistribución.

Pero a su vez, los migrantes habían creado un gran resentimiento entre los campesinos hondureños, que a su vez libraban una batalla simultánea por la tierra contra la élite de su país.

En medio de esta situación, el gobierno de Honduras aprobó una reforma agraria para evitar más tensiones.

El problema fue que esa ley se enfocó no en la tierra que poseían los terratenientes y las compañías estadounidenses, sino en la que tenían los migrantes.

El entonces presidente hondureño, Oswaldo López Arellano, comenzó a deportar a los salvadoreños que habitaban su país.

Además de esto, existía una disputa limítrofe en una zona conocida como el golfo de Fonseca, un pequeño sector de agua en la costa del Oceáno Pacífico que comparten Honduras, El Salvador y Nicaragua.

“En gran medida, esta guerra tuvo que ver con la tierra disponible, demasiada gente en un lugar demasiado pequeño, y la oligarquía gobernante simplemente alimentó el fuego con la ayuda de la prensa”, le dijo a la BBC Dan Hagedorn, el autor de “Cien horas de guerra”.

A su vez, el gobierno del presidente salvadoreño Fidel Sánchez intentaba lidiar con el regreso masivo de los migrantes, mientras la oligarquía terrateniente comenzaba a presionar para que se tomaran acciones militares.

Los medios comenzaron a publicar reportes sobre la persecución a los salvadoreños, en los que se incluían testimonios de violaciones y asesinatos.

Y fue en la mitad de este mar de tensiones cuando se disputaron aquellos tres partidos de fútbol.

“Estaban pasando cosas más graves a nivel político. Pero coincidentemente, que se tuvieran que disputar esos tres encuentros para el Mundial de 1970 no ayudó para nada. Aquí el fútbol se vive de una forma muy apasionada”, le explicó a la BBC Ricardo Otero, periodista deportivo de la cadena Univisión.

“Sentimos que teníamos el deber patriótico de ganar. En serio teníamos miedo de perder, porque en esas circunstancias iba a ser una deshonra que nos iba a acompañar por el resto de nuestras vidas”, dijo Rodríguez.

“Lo que sí no sabíamos era la importancia histórica de ese gol: que sería utilizado como un símbolo de la guerra”, añadió.

¿Cómo ocurrió?
El 27 de junio, mientras los jugadores se preparaban para el partido decisivo, El Salvador rompió relaciones diplomáticas con Honduras.

El ministro del Interior salvadoreño, Francisco José Guerrero, dijo que cerca de 12.000 salvadoreños habían dejado Honduras después del segundo partido debido a “una persecución, proveniente de un partido entre ambas selecciones”, de acuerdo al reporte del diario británico The Guardian.

Al día siguiente del partido, la agencia de noticias UPI envió un artículo con un titular sugerente: “La ‘guerra’ del fútbol la ganó El Salvador 3-2”. De acuerdo al reporte, cerca de 1.700 efectivos de la policía mexicana habían sido desplegados para evitar actos de violencia.

Mientras que los hinchas salvadoreños gritaban “asesinos, asesinos” a sus rivales.

“La gente estigmatizó ese gol como si hubiera sido el detonante de la guerra. Igual, la guerra hubiera comenzado con o sin ese gol”.

Tras el partido, las escaramuzas fronterizas se intensificaron.

El 14 de julio, El Salvador ordenó a sus fuerzas militares invadir Honduras y se lanzó una ofensiva aérea.

Hagedorn, quien en ese momento hacía parte del ejército de EE.UU. y estaba instalado en la zona del Canal de Panamá, tenía su oficina cerca del teletipo.

“Cada vez que recibíamos algún tipo de alerta, la máquina empezaba a imprimir cosas automáticamente, por su cuenta”, recordó.

“Lo recuerdo vívidamente: comenzó a tipear y siguió, siguió. Yo pregunté: ‘¿Qué diablos está pasando?’ Así que nos acercamos y echamos un vistazo, ahí nos dimos cuenta de que los salvadoreños habían invadido Honduras”, anotó.

El periodista polaco Ryszard Kapuscinski fue uno de los pocos corresponsables extranjeros que estaban en la zona cuando comenzó la invasión.

Según contó, envió sus artículos desde Tegucigalpa a través del único teletipo que había en el país. El mismo que había utilizado minutos antes el presidente López Arellano para informarle a su embajador en EE.UU. sobre la invasión.

Unos años después, Kapuscinski escribió sobre esos días en Honduras y recordó los grafitis que había en las paredes de la capital: “Nadie le gana a Honduras” y “Vamos a vengarnos de ese 3-0”.

En ese tiempo, la Organización de Estados Americanos, logró que ambos países llegaran a un cese al fuego el 18 de julio, después de que 3.000 personas murieran, la mayoría de ellos civiles hondureños.

Muchos de ellos resultaron desplazados por los combates. Después de una fuerte presión internacional, El Salvador retiró sus tropas en agosto.

Pero el resentimiento no terminó ahí. Durante décadas no hubo intercambio comercial entre ambos países y la frontera se clausuró.

Mo Hume, profesor de la Universidad de Glasgow, le explicó a la BBC que los problemas domésticos en El Salvador que causaron la Guerra del Fútbol -una pequeña élite terrateniente y un gran número de agricultores desposeídos- afectarían al país durante décadas siguientes al conflicto.

“Las preguntas socioeconómicas más importantes que formaron parte de la Guerra del Fútbol fueron la causa principal de la guerra civil [de El Salvador] desde 1979 hasta 1992″, dijo. Se cree que más de 70.000 personas murieron en el conflicto.

Desde entonces, las tensiones entre Honduras y El Salvador han perdurado.

Las disputas fronterizas entre ambos países continúan hasta ahora, más allá que en 1992 la Corte Internacional de la Haya hubiera tomado una decisión al respecto.

Pero para el hombre que marcó aquel gol para El Salvador, no es rencor lo que tiene en su memoria.

“Para mi ese gol siempre va a ser una fuente de orgullo deportivo. De lo que estoy seguro ahora que las autoridades y los políticos usaron esa victoria para glorificar la imagen del país”, dijo Rodríguez, quien cumplió 70 años.

Y más allá de lo que ocurrió, Rodríguez tiene claro la selección de El Salvador siempre obtuvieron un inmenso “aprecio y respeto” de sus rivales hondureños.

“Nunca fue un partido entre enemigos, sino entre rivales deportivos”, concluyó.

Fuente: www.bbc.com

Espero que esa imagen mueva conciencias para que no tengamos que seguir tomando fotos de migrantes ahogados a mitad del río”

Cuando los cuerpos emergieron en la mañana del lunes, la reportera mexicana Julia Le Duc apretó el obturador sin muchas esperanzas de que sus imágenes tuvieran un impacto mayor que el que han tenido en los últimos años los más de 20 migrantes ahogados que ha fotografiado.

Había llegado allí un día antes, cuando tras algunas llamadas de emergencia, recibió un aviso de que algo pasaba a las orillas del Río Bravo, en Matamoros, Tamaulipas.

“En la tarde del domingo reportan a la policía que hay una mujer gritando en la orilla y cuando llego allí, está esta mujer muy joven, Tania Valdés Ávalos, en muy mal estado, contando que a su familia, a su esposo y a su niña pequeña, se la había llevado el río”, le cuenta a BBC Mundo la corresponsal del diario mexicano La Jornada.

Las autoridades iniciaron la búsqueda de los cuerpos, pero la suspendieron a horas de la madrugada por los riesgos de la zona, un área infectada de malezas, alimañas y otros peligros.

“Algunos reporteros acudimos la mañana siguiente cuando se reanudó la búsqueda y los cuerpos aparecen poco después de las 10:00 AM. Los que estábamos ahí tomamos las fotos y la sorpresa fue que los dos cuerpos emergieron juntos y abrazados”.

Las imágenes del salvadoreño Óscar Alberto Martínez Ramírez, de 25 años, y su hija Valeria, de un año y 11 meses, se volvieron rápidamente virales y un testimonio gráfico de los peligros y las tragedias que enfrentan cotidianamente miles de migrantes en su intento por llegar a Estados Unidos.

Según diversos reportes, Martínez, su esposa y la hija de ambos llegaron el pasado domingo a Matamoros después de esperar por más de dos meses en un centro migratorio de México la posibilidad de pedir asilo en Estados Unidos.

Al constatar que la oficina migratoria de la localidad estaba cerrada ese día, el hombre decidió cruzar: tomó a la menor, nadó con ella hasta la otra orilla y la dejó en tierra firme antes de ir por su esposa.

Sin embargo, de acuerdo con el testimonio de la madre, la niña, al ver que el padre se alejaba, se volvió a meter al agua. Cuando Martínez regresó por ella, ambos fueron arrastrados por la corriente.

Medios salvadoreños indican que la familia buscaba mejores condiciones de vida y un futuro más digno para su hija.

Una tragedia cotidiana

Las imágenes de Le Duc y otros reportaron que también estaban allí generaron a partes iguales empatía, críticas e indignación.

Algunos cuestionaron hasta qué punto era legítimo publicar este tipo de fotos o si incentivaban el morbo y la discriminación hacia las familias migrantes, mientras otros alegaron que era una forma de mostrar desde un caso la tragedia de los que intentan llegar a la frontera.

De hecho, la corresponsal del diario La Jornada en Tamaulipas asegura que se trata una escena común en la frontera.

El mismo día de la tragedia que fotografió Le Duc, agentes de la Patrulla Fronteriza encontraron en Texas los cadáveres de otras cuatro personas: una mujer de 20 años, un niño pequeño y dos bebés.

“He cubierto las notas policiales y tomado fotos de unos 25 ahogados. Pero creo que esta conmovió más por el tema de cómo salieron padre e hija abrazados. Lo que describe la imagen es que, él en el intento, mete a la niña en la playera (camiseta), la niña lo abraza y así aparecen los cuerpos”.

Crisis migratoria
Le Duc asegura que más allá de lo terrible de la foto, una tragedia como la que fotografió era predecible.

“Aquí se ha estado publicando mucho a nivel local sobre lo que estaba pasando, alrededor del Puente Nuevo (un cruce migratorio). Hay ‘focos rojos‘ por el hacinamiento de migrantes, por las condiciones que en que viven los centroamericanos, los cubanos, incluso migrantes de África, que están en condiciones deplorables, sin ninguna ayuda oficial”.

De acuerdo con la reportera, la situación humanitaria ha llevado a que muchos vecinos de la zona se organicen para para llevarles agua y comida.

Diversas organizaciones de derechos humanos han denunciado que el recrudecimiento de las normas para pedir asilo en EE.UU. por parte del gobierno de Donald Trump ha llevado a una crisis migratoria en la frontera con México.

Bajo las nuevas normativas, los migrantes deben esperar -en algunos casos por meses- en suelo mexicano hasta que las autoridades estadounidenses resuelvan sus solicitudes.

Solo en la frontera con Matamoros, de octubre hasta mayo pasado, se habían presentado unas 2.000 solicitudes de asilo, mientras un total de 593.507 migrantes se reportaron ante las autoridades de Estados Unidos en las diferentes fronteras con México.

Grupos civiles aseguran que el hecho de que sea más complicado el mecanismo de pedir asilo y presentarse ante los puestos fronterizos puede llevar a un aumento en los números de muertes en la frontera, dado que los emigrantes pueden tender a utilizar cruces peligrosos para ingresar sin autorización en EE.UU.

Según datos del gobierno de EE.UU., en 2018 al menos 283 personas murieron en su intento de cruzar la frontera.

“Nosotros sabíamos que había un foco rojo en el campamento de migrantes en el Puente Nuevo”, cuenta la periodista.

“Eso se está presentando desde hace tiempo y nadie ha hecho nada. Sucede esto y es cuando se voltean a ver qué está pasando en Matamoros, pero es una crisis que ya tiene meses”.

Para los que se encuentran esperando en la parte estadounidense la situación no es muy diferente.

En los últimos meses, grupos civiles y congresistas han denunciado las condiciones humanitarias de los migrantes en los centros donde son detenidos, en los que en muchos casos carecen de pasta de dientes, mantas o jabón.

La víspera, la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó destinar US$4.500 millones en ayuda humanitarias para familias migrantes, aunque la Casa Blanca rechazó la medida y se espera que Trump la vete.

Este martes, al ser cuestionado sobre la foto por periodistas el mandatario estadounidense afirmó que “la odiaba” y responsabilizó de lo sucedido a las políticas del Partido Demócrata.

“Yo espero que esas imágenes y lo que ocurrió, muevan conciencia de alguien y no tengamos que seguir tomando fotos de migrantes muertos a mitad del río“, afirma Le Duc.

“Espero que lo que ahorita es noticia y viral, se convierta en un llamado a hacer conciencia a los gobiernos sobre lo que está pasando con los migrantes, que están muriendo en la frontera porque no le están dando atención”, agrega.

Según la reportera, otras 100 familias con niños y siguen esperando en Matamoros su turno para llegar a la ventanilla donde podrán solicitar asilo.

Sin embargo, no sabe si todas lleguen a esperar ese momento.

“Hay muchas familias que siguen desesperadas, bajo el calor extremo, con hambre, con sed, que siguen durmiendo a la intemperie en condiciones inhumanas. No son delincuentes, son migrantes en tránsito”.

Fuente: www.bbc.com