La prensa oficial china informó que desde noviembre China comenzará a eliminar la práctica de usar órganos de prisioneros ejecutados en operaciones de trasplantes de órganos.
El mes fue dado a conocer por Huang Jiefu, viceministro de Salud y funcionario encargado de los trasplantes de órganos en ese país.
Las autoridades de Salud se encuentran preparando las bases de un sistema nacional que busca fomentar la donación voluntaria, un tema que ha generado rechazo entre algunos chinos por creencias culturales que indican que las personas deben ser enterradas o cremadas con sus órganos intactos.
Por años, China negó que usara órganos de prisioneros ejecutados. Hace pocos años, admitió que lo hacía.
En marzo de 2012, Huang había asegurado que el gobierno de la nación asiática planeaba abolir en un plazo de tres a cinco años la práctica de utilizar para los trasplantes órganos de presos ejecutados.