La empresa Costco, una de las mayores cadenas de ventas al mayoreo, desató una polémica cuando uno de sus almacenes en California, Estados Unidos, puso copias de la Biblia a la venta bajo el rótulo de libro de ficción.
Las biblias con la cuestionable etiqueta fueron descubiertas por un pastor cristiano, quien les tomó una foto y la distribuyó por Twitter.
Costco emitió un comunicado asumiendo la responsabilidad de lo sucedido y dijo que sólo un pequeño lote de libros había sido clasificado erróneamente por el distribuidor.
No obstante, la polémica continúa en los medios sociales.
Polémica en redes sociales
El discusión sobre si las Sagradas Escrituras son leyendas o hechos es de larga data y la posturas varían de acuerdo a la amplia gama de creyentes, desde el fundamentalista hasta el ateo.
Sin embargo, el debate se reavivó recientemente cuando unas copias de la Biblia fueron catalogadas como ficción en uno de los almacenes de Costco en EE.UU.
Caleb Kaltenbach, pastor de una iglesia cristiana ecuménica en Simi Valley, California, descubrió que todas las copias de la Biblia en su almacén local tenían un rótulo que incluye un número de catálogo, el precio del artículo y la descripción: "Ficción".
El pastor tomó una foto del libro en cuestión y la lanzó por el medio social Twitter. El mensaje generó una oleada de respuestas, a favor y en contra.
Un tuitero se preguntaba si Costco pondría el Corán (el libro sagrado del Islam) en la estantería de ficción. Otro, sin embargo, exigió que si la Biblia no era ficción alguien tendría que proveer datos factuales que demostraran lo contrario.
"Nunca, en toda mi vida, había visto la Biblia catalogada como ficción", dijo Kaltenbach al sitio de noticias ABC News. "Creo que lo que esto ha revelado es una amplia discusión sobre la fe. Hay personas que son apasionadas en su fe en Cristo y otras que están apasionadamente en contra".
Costco emitió un comunicado disculpándose por lo que llamó un "error" y explicando que sólo "un pequeño porcentaje de Biblias" fueron rotuladas equivocadamente por el distribuidor.
No obstante, la empresa asumió la responsabilidad por lo ocurrido y anunció el cambio inmediato de los rótulos equivocados y que en el futuro corregirá el modo en que se distribuye la Biblia en sus almacenes.