Hay una nueva alerta de la llegada del coronavirus a una población indígena. Se trata de los habitantes de la nacionalidad Chachi de Esmeraldas, quienes ya han sufrido la muerte de dos personas con sospecha de COVID-19 y ven que varios pobladores sufren discriminación por la presunción de que están contagiados.
El pasado 30 de abril se reportó el fallecimiento de dos personas, una de ellas era un adulto mayor con sintomatología relacionada con el COVID-19, según reportó la Federación de Centros Chachis de Esmeraldas, que agrupa a 52 comunidades de Eloy Alfaro, Quinindé, Rioverde, Esmeraldas, y Muisne.
Un comunicado de la Fundación Regional de Asesoría en Derechos Humanos (Inredh) recoge la preocupación de esta Federación, ya que después de la muerte de estas dos personas en la población de Chontaduro-Hojas Blancas, habrían acudido cuatro médicos que no descartaron que la causa haya sido un posible contagio de coronavirus. Sin embargo, no iniciaron pruebas que confirmen o descarten esta posibilidad.
La nacionalidad gestionó una donación, a través de una organización no gubernamental aliada, de 50 pruebas rápidas y 20 pruebas PCR que se empezarán a realizar desde este jueves en la comunidad de Chontaduro.
El presidente de la Federación de Centros Chachis de Esmeraldas, Santiago de la Cruz, pide a instituciones del gobierno como el Ministerio de Salud que envíen una brigada médica hasta las 52 comunidades para iniciar actividades de prevención o aislamiento social a fin de evitar más contagios.
El dirigente denunció que dos personas que volvieron de la Sierra han sido impedidos de ingresar a sus casas, y han sido «víctimas de discriminación racista y excluyente por habitantes de sectores aledaños». «Los comerciantes les impiden acercarse», no les venden víveres y les exigen que se alejn.
Otro hecho se presentó con mujeres de la población Hojas Blancas, ya que cuando se presentaron las dos muertes, miembros de la Policía Nacional les habrían impedido salir a realizar compras «con agresiones verbales asegurando que los chachis son portadores del virus», recoge el comunicado de la Inredh.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) urgió al Estado ecuatoriano a tomar medidas «eficaces para proteger el derecho a la salud y la integridad» de las nacionalidades indígenas.
Recordó que estas comunidades tienen «derecho a recibir una atención de salud con pertinencia cultural, que tome en cuenta los cuidados preventivos, las prácticas curativas y la medicina ancestral». (I)
Fuente: www.eluniverso.com
