Grupos activistas están pidiendo regulaciones más estrictas para la industria pesquera internacional después de que se descubrió una extendida práctica de etiquetados incorrectos en varios países.
Biólogos de la Universidad de Salford en Inglaterra encontraron que 7% de los productos que analizaron en el Reino Unido contenían pescado más barato que el que indicaba el etiquetado.
Por ejemplo, variedades costosas como el bacalao se habían sustituido por pez gato del sureste de Asia.
Las pruebas en Irlanda encontraron que 25% de los pescados analizados no estaban etiquetados.
Otros estudios separados han descubierto un extendido etiquetado incorrecto en restaurantes en Estados Unidos.