Cerrando puertas. O cerrando capítulos. Como quieras llamarlo.
Lo importante es poder cerrarlos. Lo importante es poder dejar ir momentos de la vida que se van clausurando.
¿Terminó tu trabajo? ¿Se acabó la relación? ¿Ya no vives más en esa casa? ¿La amistad se acabó? Puedes pasar mucho tiempo de tu presente "revolcándote" en los porqués, en devolver el cassette y tratar de entender por qué sucedió tal o cuál hecho.
Tanto en el cine, como en las novelas y las series de televisión, los médicos y las enfermeras siempre llevan uno.