Archives mayo 2018

James Harrison, el hombre del “brazo de oro”, se retira después de salvar a 2,4 millones de bebés

Cuando James Harrison tenía 18 años fue sometido a una cirugía mayor. Era 1951 y los médicos descubrieron que tenía “sangre mágica”.

Encontraron que la sangre de este australiano contenía un raro anticuerpo con el cual se podía crear un tratamiento para salvar vidas. Más específicamente, vidas de bebés que sufren la enfermedad hemolítica del recién nacido o EHRN.

Entonces Harrison se dedicó a donar sangre y plasma de forma regular y lo ha hecho durante más de seis décadas. Incluso se le conoce como “el hombre con el brazo de oro”.

Pero ahora que tiene 81 años ya ha superado la edad límite para ser donante y el viernes lo hizo por última vez.

El Servicio de Donación de Sangre de la Cruz Roja Australiana calcula que Harrison, en el curso de su vida, ayudó a salvar la vida de unos 2,4 millones de bebés.

La enfermedad hemolítica del recién nacido es un trastorno en el que la madre durante el embarazo produce anticuerpos en la sangre que destruyen los glóbulos rojos del feto.

Según el diario Sydney Morning Herald, Harrison realizó 1.172 donaciones: 1.162 del brazo derecho, 10 del brazo izquierdo.

¿Qué es la EHRN?

La enfermedad hemolítica del recién nacido es un trastorno en el que la madre durante el embarazo produce anticuerpos en la sangre que destruyen los glóbulos rojos del feto.

Esto ocurre cuando la madre y el bebé tienen tipos de sangre diferentes, la mayoría de los casos se producen cuando la madre tiene sangre Rh negativo y el feto sangre Rh+, heredada del padre.

La enfermedad no causa ningún problema a la madre pero sí puede conducir a que el bebé se vuelva anémico, se perjudique su desarrollo, padezca ictericia y en ciertos casos muera.

“Después de la operación me llamaron a la oficina de los médicos y me preguntaron si aceptaría hacer un ensayo clínico con ellos”, le cuenta James Harrison a la BBC.

“Me dijeron que me asegurarían por medio millón de dólares. Hablé con mi esposa y ella dijo que podría gastarse ese millón de dólares con facilidad. Entonces decidimos que sí participaría en el ensayo”.

 

Anti-D
Durante los 1950, los científicos habían descubierto que el anticuerpo de la madre que causa daños en el feto, llamado globulina hiperinmune Rh (RhIg), conocido en Australia como Anti-D, también podía utilizarse para crear un tratamiento.

El anticuerpo de la madre que causa daños en el feto, llamado globulina hiperinmune Rh (RhIg), conocido en Australia como Anti-D, también se utiliza para producir un tratamiento para la EHRN.
Y los médicos descubrieron que la sangre de Harrison contenía, en grandes cantidades, ese compuesto Anti-D que podía salvar la vida de los bebés con EHRN.

“De la sangre yo donaba tomaban el plasma, que es un componente de la sangre, y la llevaban a los laboratorios para producir inyecciones con el Anti-D”, le contó Harrison a la BBC.

“Estas son las inyecciones que se suministran a las mujeres con sangre Rh negativa, que son identificadas durante su primer embarazo con un análisis de sangre”.

“La primera inyección se da en los primeros meses del embarazo y la segunda después del parto”, explica Harrison.

La inyección de RhIg provoca la destrucción de los glóbulos rojos del feto que han estrado en la circulación materna, impidiendo que el cuerpo de la madre genere anticuerpos peligrosos que pueden causar complicaciones en el feto o complicar futuros embarazos.

“Fin de una era”
“Muy poca gente tiene estos anticuerpos en concentraciones tan altas (como las de Harrison)”, le dijo al Herald, Jemma Falkenmire, del Servicio de Donación de Sangre de la Cruz Roja Australiana.

“Su cuerpo produce gran cantidad de ellos y cuando dona sangre, su organismo produce aún más”, agrega.

“Durante mi última donación el viernes llegaron unas doce madres con sus bebés para agradecerme lo que he hecho”, cuenta Harrison.
Harrison asegura que se siente muy feliz de haber ayudado a salvar vidas de bebés. Y cuenta que entregó plasma siempre que el servicio de donación se lo pidió.

Con esto contribuyó a los tratamientos de millones de mujeres en Australia, incluida su propia hija.

“Durante mi última donación el viernes llegaron unas doce madres con sus bebés para agradecerme lo que he hecho”, cuenta Harrison.

“Fue bastante triste, el fin de una era para mí”.

“Mi propia hija recibió una de estas inyecciones y su hijo, mi nieto, cumple ahora 23 años. Esto me ha hecho muy feliz, porque yo pude tener un nieto sano y también muchas otras personas”, afirma James Harrison.

Cómo Argentina se convirtió en el único país latinoamericano en tener un acuerdo nuclear con Irán

A finales de los años 80 Argentina e Irán firmaron tres contratos para que el país sudamericano colaborara con el programa nuclear iraní.

Así Argentina se convirtió en el único país latinoamericano en ofrecer asistencia nuclear a Irán, cuyo programa atómico volvió a estar en el centro de la atención mundial tras la decisión de Estados Unidos de retirarse de un pacto internacional que busca evitar que Irán fabrique armas nucleares.

El programa nuclear iraní ha estado bajo la lupa de Occidente -en particular de Estados Unidos.- desde la revolución islámica de 1979 que llevó al poder al ayatolá Ruhola Jomeini.

Por eso, el recuerdo de esos pactos que Argentina firmó con Jomeini siguen generando controversia.

Pero aunque en el inconsciente colectivo quedó el recuerdo de que Argentina cooperó con el programa nuclear iraní, la realidad es algo diferente.

En BBC Mundo investigamos a fondo esos acuerdos y te explicamos qué fue lo que realmente ocurrió y cuál fue la verdadera influencia de Argentina en el programa atómico de la república islámica.

Cómo comenzó todo
Uno de los principales expertos en este tema es el físico nuclear argentino Darío Jinchuk.

Jinchuk trabajó hasta el año 2007 en la Comisión Nacional de Energía Atómica de Argentina (CNEA) y luego fue consultor privado del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), en Viena, Austria, durante diez años.

Actualmente se desempeña como consultor independiente en temas nucleares.

El físico nuclear argentino y consultor privado Darío Jinchuk conoce como nadie la historia de los vínculos nucleares entre Argentina e Irán.
Hablando con BBC Mundo desde la capital austríaca, Jinchuk explicó cómo comenzó la cooperación nuclear entre Argentina e Irán.

“El primer contacto oficial fue una visita a Argentina en 1985 de una delegación de la Organización de Energía Atómica de Irán (OEAI), que fue invitada por la CNEA argentina”.

La visita se realizó cuando Irán estaba en guerra con su vecino Irak (ese conflicto duró de 1980 a 1988).

Las fuerzas iraquíes habían logrado destruir algunas instalaciones atómicas iraníes, entre ellas dos plantas de producción de energía eléctrica (el Bushehr I y II), de fabricación alemana.

“Argentina tenía -y sigue teniendo- una empresa estatal, llamada Invap, que se especializa en la construcción de centrales nucleares”, explicó Jinchuk.

De ahí el interés de los persas en que Argentina reconstruyera sus plantas bombardeadas.

Sin embargo, no se logró avanzar sobre ese tema.

En cambio, sí continuaron las conversaciones sobre otro interés iraní: la colaboración argentina en la fabricación de combustibles nucleares.

El uranio es uno de los elementos químicos que se usan como combustible nuclear.
Los controvertidos acuerdos
En esto sí se logró finalmente alcanzar un acuerdo y en 1988 se firmaron los dos contratos comerciales que serían cuestionados.

Uno era para la construcción de una planta piloto de purificación y conversión de uranio, un contrato por US$10 millones, según Jinchuk.

El otro era un contrato más valioso (unos US$15 millones) para erigir una fábrica de elementos combustibles para reactores de investigación.

En medio de las negociaciones de estos convenios -y antes incluso de que se firmaran los dos contratos- Argentina e Irán pactaron otra colaboración.

Pero este acuerdo (valorado en unos US$5 millones) no nació motu proprio: fue fomentado por el Organismo Internacional de Energía Atómica.

El OIEA ya estaba trabajando para limitar los posibles peligros del programa nuclear iraní y por eso le pidió a Argentina que reacomodara el reactor de la Universidad de Teherán, que usaba uranio enriquecido al 90% (lo que permitía su uso potencial en armas atómicas).

Irónicamente ese reactor le había sido provisto a Irán por EE.UU. muchos años antes de la revolución islámica.

La misión de los expertos argentinos era reducir el enriquecimiento de uranio del 90% al 20%, objetivo que se logró en 1987.

Los pactos nucleares con Irán se cancelaron durante el gobierno de Carlos Menem, cuyo canciller definió las relaciones con EE.UU. como “carnales”.
Costosa marcha atrás
Al final, ese trabajo sería la única colaboración nuclear entre ambos estados.

Por presión de la comunidad internacional -en particular de Washington- los dos contratos comerciales firmados en 1988 fueron suspendidos por Argentina.

“El primer embarque de materiales ya estaba listo para ser despachado en 1991 cuando la Cancillería argentina ordenó su suspensión debido a la situación en Medio Oriente”, recordó Jinchuk.

Esa suspensión, ordenada por el gobierno de Carlos Saúl Menem (1989-1999), le terminaría costando cara a Argentina.

Por haber roto unilateralmente los acuerdos comerciales Irán le demandó una millonaria compensación a los sudamericanos.

Tardaron años en llegar a un acuerdo y finalmente Argentina pagó una indemnización de unos US$5 millones a finales de 1996.

Influencia argentina
¿Podría decirse, entonces, que el principal impacto que tuvo Argentina en el programa nuclear iraní fue esta única colaboración para reducir su peligrosidad?

No exactamente…

La planta de energía nuclear Bushehr I, que Irán quería que Argentina reconstruyera, finalmente fue puesta nuevamente en funcionamiento décadas más tarde (en 2010) con ayuda de Rusia.
Hay otro episodio, aún anterior, que vincula a iraníes y argentinos con el tema nuclear, pero el vínculo no es oficial.

Según Jinchuk, en 1973, cuando Irán planeaba la creación de su Organización de Energía Atómica, contrató a siete expertos nucleares argentinos.

Aunque no reveló sus nombres, Jinchuk dio detalles de cómo ocurrió su contratación.

“Habían sido despedidos de la CNEA por el gobierno peronista y asesoraron a Irán en la creación de la OEAI de forma independiente, realizando viajes a ese país durante varios años”.

Sin embargo, para quienes buscan hallar algo siniestro en este vínculo, el físico argentino recalcó que los expertos de su país “se especializaban en usos pacíficos de la energía nuclear para fines científicos”.

Además cabe recordar que el desarrollo nuclear de Irán se dio con el auspicio y la ayuda de EE.UU. que en ese momento tenía como aliado al Sha Mohammad Reza Pahlevi, depuesto por la revolución islámica de 1979.

Pocos hubieran imaginado entonces que décadas más tarde Washington e Irán se convertirían en los rivales que son hoy.

Cuáles son los riesgos de usar memorias USB en el trabajo y por qué IBM se las prohibió a sus empleados

Los trabajadores de IBM ya no pueden usar memorias USB. También les está prohibido utilizar tarjetas SD y unidades flash.

¿El motivo? La posibilidad de causar daño “financiero y a la reputación” de la empresa si pierden o hacen un uso inadecuado de esos dispositivos.

A partir de ahora, si necesitan trasladar datos deberán hacerlo a través de una red interna, un servicio para sincronizar y compartir información.

El decreto que establece esta nueva medida señala que no hacerlo podría ser “perjudicial” para la empresa.

Pero, ¿cuáles son los riesgos?

“Un riesgo real”

Los empleados del gigante informático fueron avisados de las nueva política de la multinacional informática por Shamla Naidoo, la directora de seguridad global d la compañía.

A algunos departamentos de IBM se les había prohibido usar dispositivos portátiles extraíbles durante algún tiempo, pero “en las próximas semanas, la medida se ampliará a todo el mundo”, dijo Naidoo.

¿Qué peligro representa para la empresa un dispositivo USB?
“Revisamos y mejoramos con frecuencia nuestros estándares y prácticas de seguridad para proteger tanto a IBM como a nuestros clientes en un entorno de amenazas cada vez más complejo”, le dijo a la BBC una vocera de IBM.

Y dentro de ese ambiente intimidatorio, uno de los peligros más temidos es el robo de datos.

El experto en seguridad Kevin Beaumont le contó a la BBC que este es “un movimiento valiente” por parte de IBM, pues “los dispositivos USB presentanun riesgo real, ya que suele ser muy fácil extraer datos de la empresa a través de ellos”.

Un ejemplo reciente fue lo que ocurrió en Facebook con la filtración de Cambridge Analytica, que afectó al propio Mark Zuckerberg, su fundador… y a cerca de 90 millones de usuarios de la red social.

Beamunt también explicó que otro de los peligros que implican es la inserción de algún software malicioso (malware) en los equipos o sistemas de la empresa.

De hecho ya ocurrió antes: en 2017, una investigación reveló que los Storwize, los servidores con almacenaje en la nube que IBM pone a disposición de otras empresas, se distribuyeron con una memoria USB que tenía un malware en su interior.

Además, la empresa de seguridad informática Panda Security, con base en España, explica en su sitio web que “cualquier dispositivo de almacenamiento USB que entre en una oficina puede poner en riesgo la seguridad de toda la organización”.

Y cita como algunos de esos peligros las “vulnerabilidades de los propios pendrives, software malicioso transmitido a través de ellos o el simple robo de datos”.

Las dificultades
A pesar de que representan un riesgo real, Beamunt también dice que es posible que IBM encuentre dificultades a la hora de implementar su plan.

“Técnicamente, es bastante fácil controlar el acceso a las memorias USB y a los datos que pueden ser copiados en ellos”, dijo Beaumont.

Uno de los temores son las filtraciones de datos o la instalación de malware en los equipos de la empresa.
“Realísticamente puede ser problemático, ya que habrá empleados que las usen para fines comerciales logísticos. Además, requerirá que algunos miembros del equipo cambien sus hábitos de trabajo”.

Otros, como Sumir Karayi, director ejecutivo de la empresa de seguridad 1E, opinan que la medida de IBM fue una “reacción exagerada”.

“Prohibir los USB no evitará que la gente robe datos”, le dijo Karayi a la BBC. “En cuanto a las [posibles] pérdidas, una computadora portátil, un NAS (dispositivo de almacenamiento conectado en red) o un servidor FTP es igualmente fácil de extraviar”.

Se espera que los trabajadores de la empresa dejen de usar este tipo de aparatos a finales de mayo, fecha que coincide con la puesta en marcha de la nueva regulación europea de protección de datos, GDPR (el día 25).

Esta ley impondrá multas más severas para quienes no hagan lo suficiente para proteger la información sensible de las organizaciones.

IBM considera que sería “perjudicial” no poner en práctica este tipo de medidas.
IBM fue fundada en 1911 y es una de las empresas tecnológicas más antiguas de Estados Unidos. Entre sus inventos más destacados destaca el cajero automático, el código de barras, la banda magnética o la cirugía láser.

El Loco Reflexion

En un pueblo rodeado de cerros habitaba un loco, la gente del pueblo le llamaba así: «EL LOCO», ¿y porqué le llamaban así?, ¿Qué acaso hacía cosas disparatadas, cosas raras, cosas diferentes a lo que hacen la mayoría de las personas, al menos en ese pueblo?.
La gente al verlo pasar se reía y se burlaba de él, humildemente vestido, sin posesiones, sin una casa que se dijera de su propiedad, sin una esposa ni unos hijos; *un desdichado*, pensaba la gente, alguien que no beneficiaba a la sociedad, **un inútil** comentaban otros.

Más he aquí que este viejo ocupaba su vida sembrando árboles en todas partes donde pudiera, sembraba semillas de las cuales nunca vería ni las flores ni el fruto, y nadie le pagaba por ello y nadie se lo agradecía, nadie lo alentaba, por el contrario, era objeto de burla ante los demás.
Y así pasaba su vida, poniendo semillas, plantando arbolitos ante la burla de los demás. Y he aquí que ese ser era un gran Espíritu de Luz, que poniendo la muestra de como se deben hacer las cosas, sembrando, siempre sembrando sin esperar a ver el fruto, sin esperar a saborearlo.

Y sucedió que un día cabalgaba por esos rumbos el Sultán de aquellos lugares, rodeado de su escolta y observaba lo que sucedía verdaderamente en su reino, para no escucharlo a través de la boca de sus ministros.
Al pasar por aquel lugar y al encontrarse al Loco le preguntó: _ ¿Qué haces, buen hombre?
Y el viejo le respondió: _ Sembrando Señor, sembrando.
Nuevamente inquirió el Sultán: _ Pero, ¿cómo es que siembras?. estás viejo y cansado, y seguramente no verás siquiera el árbol cuando crezca. ¿Para qué siembras entonces?
A lo que el viejo contesto: _ Señor, otros sembraron y he comido, es tiempo de que yo siembre para que otros coman.
El Sultán quedo admirado de la sabiduría de aquel hombre al que llamaban LOCO, y nuevamente le preguntó:
_ Pero no verás los frutos, y aun sabiendo eso continuas sembrando… Por ello te regalaré una monedas de oro, por esa gran lección que me has dado.

El Sultán llamó a uno de sus guardias para que trajese una pequeña bolsa con monedas de oro u las entregó al sembrador.
El sembrador respondió : _Ves, Señor, como ya mi semilla ha dado fruto, aún no la acaba de sembrar y ya me está dando frutos, y aun más, si alguna persona se volviera loca como yo y se dedicara solamente a sembrar sin esperar los frutos sería el más maravilloso de todos los frutos que yo hubiera obtenido, porque siempre esperamos algo a cambio de lo que hacemos, porque siempre queremos que se nos devuelva igual que lo que hacemos. Esto, desde luego, sólo cuando consideramos que hacemos bien, y olvidándonos de lo malo que hacemos.

El Sultán le miró asombrado y le dijo : _ ¡Cuánta sabiduría y cuánto amor hay en ti!, ojalá hubiera más como tú en este mundo, con unos cuantos que hubiese, el mundo sería otro; más nuestros ojos tapados con unos velos propios de la humanidad, nos impiden ver la grandeza de seres como tu. Ahora me retiraré porque, si sigo conversando contigo, terminaré por darte todos mis tesoros, aunque sé que los emplearlas bien, tal vez mejor que yo. ¡Qué Alá te Bendiga!.

Y terminado esto, partió el Sultán junto con su séquito, y el Loco siguió sembrando y no se supo de su fin, no se supo si termino muerto y olvidado por ahí en algún cerro, pero él había cumplido su labor, realizó la misión, la misión de un Loco.

Reflexión:
Este cuento sirve para ilustrarnos lo que muchos seres hacen en este mundo, pero callados, sin esperar recompensa y he aquí que se requieren muchos locos en el mundo, seres que repartan la Luz, que den la enseñanza, que sean guías en este mundo tan hambriento de la enseñanza espiritual.

El Error Reflexion

El error más grande lo cometes cuando, por temor a equivocarte, te equivocas dejando de arriesgar en el viaje hacia tus objetivos.

No se equivoca el río cuando, al encontrar una montaña en su camino, retrocede para seguir avanzando hacia el mar; se equivoca el agua que por temor a equivocarse, se estanca y se pudre en la laguna.

No se equivoca la semilla cuando muere en el surco para hacerse planta; se equivoca la que por no morir bajo la tierra, renuncia a la vida.

No se equivoca el hombre que ensaya distintos caminos para alcanzar sus metas, se equivoca aquel que por temor a equivocarse no acciona.

No se equivoca el pájaro que ensayando el primer vuelo cae al suelo, se equivoca aquel que por temor a caerse renuncia a volar permaneciendo en el nido.

Pienso que se equivocan aquellos que no aceptan que ser hombre es buscarse a sí mismo cada día, sin encontrarse nunca plenamente.

Creo que al final del camino no te premiarán por lo que encuentres, sino por aquello que hayas buscado honestamente.