Archives 2018

Panamá, el país de América Latina atrapado en la “guerra fría” entre China y Estados Unidos

Elegir bandos nunca es divertido. Especialmente si estás atrapado en medio de dos gigantes.

Panamá es uno de los muchos países donde la rivalidad entre Estados Unidos y China se está materializando.

El país centroamericano quedó atrapado enun fuego cruzado la semana pasada cuando el secretario de estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, criticó la actividad económica de China en Panamá, durante una visita a este país.

Pompeo calificó las acciones de China como “depredadoras” y dijo que las empresas estatales del gigante asiático se muestran de una manera “que claramente no es transparente, no está motivada por el mercado y no está diseñada para beneficiar al pueblo de Panamá sino al gobierno chino”.

Como era de esperar, China respondió con otro ataque verbal.

Pero, en los primeros comentarios públicos de Panamá después de las declaraciones de Pompeo, la vicepresidenta Isabel de Saint Malo de Alvarado dijo que, si bien su país acoge con satisfacción la inversión extranjera directa tanto de Estados Unidos como de otros países -incluido China-, serían “cuidadosos” al permitirla entrada de nuevas empresas y a la hora de elegir nuevos proveedores.

Panamá rompió relaciones con Taiwán para acercarse a Pekín este año.
Las declaraciones de la vicepresidenta panameña no fueron una crítica abierta a Pekín, sino más bien un enfoque más matizado de cómo hacer negocios con China, algo que otros países también están empezando a expresar, cada vez con mayor frecuencia.

Países “atrapados”
Lo que muestran estos hechos es que la creciente hostilidad de Estados Unidos hacia China en el escenario internacional está afectando a los países atrapados en el medio.

Panamá siempre ha sido muy importante para Estados Unidos, ya que tanto su ubicación como su papel en el comercio mundial tienen un papel “vital” para la prosperidad y la seguridad nacional del país norteamericano, como señala el propio Departamento de Estado.

Pompeo calificó las acciones de China como “depredadoras”, en su reciente visita a Panamá.
Estados Unidos es el mercado de exportación más importante de Panamá y, en los últimos años, China también ha estado fortaleciendo sus lazos con la nación latinoamericana.

En 2017, Panamá abandonó los vínculos de larga data con Taiwán y, en su lugar, firmó 19 acuerdos de cooperación con China, incluido un estudio de factibilidad con vista a firmar un acuerdo de libre comercio entre ambos países.

La reciente hostilidad de Estados Unidos hacia el empoderamiento económico de China significa que países como Panamá, que han acogido la inversión china en el pasado, tendrán que encontrar una nueva y más delicada manera de hacer negocios en medio del conflicto económico entre las dos superpotencias.

Posiciones matizadas
Tomemos como ejemplo los comentarios de la vicepresidenta panameña sobre la iniciativa china conocida como “Un cinturón, una ruta” (o la nueva Ruta de la Seda).

Es revelador lo cuidadosa que fue al referirse a la tan criticada “diplomacia de la deuda”, que ha atormentado a algunos de los países que participan en este proyecto de infraestructura masiva de China.

“No dependemos de compañías que vengan y financien nuestros proyectos por nosotros”, dijo la vicepresidenta en el programa Asia Business Report de la BBC.

“(Pero) los países que son vulnerables porque sus economías son débiles, porque no tienen un sistema sólido para garantizar que se den pasos que tengan en cuenta sus propios intereses, estarían en una situación diferente”.

Panamá siempre ha jugado un rol crucial para Estados Unidos, por su ubicación geográfica. En la fotografía, la vicepresidenta panameña y el vicepresidente de Estados Unidos Mike Pence visitan el Canal de Panamá en 2017.
Este tipo de comentarios se están volviendo cada vez más común en los países que se encuentran atrapados en el conflicto económico entre Estados Unidos y China, mientras intentan navegar por este nuevo panorama.

Por ejemplo, los funcionarios de algunos países del sudeste asiático, aunque detestan criticar públicamente a China, me han dicho en privado que la nueva postura del gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, hacia Pekín los ha animado a hablar.

Y no nos equivoquemos. Esta no es solo una batalla por el comercio.

Cada vez más las dos superpotencias del mundo luchan entre sí en nuevos ámbitos.

Fuente: www.bbc.com

Qué es la dysania y por qué podría ser la razón por la que no quieres levantarte por las mañanas

Todos hemos experimentado ese momento en la mañana cuando suena el despertador y no eres capaz de salir de la cama. ¿Pero y si ese momento se repitiese todos los días?

Podrías tener dysania.

No es lo mismo que ser un dormilón o perezoso.

“Dysania es un término poco conocido que se utiliza para referirse a aquellas personas que son incapaces de levantarse por las mañanas”, explica el doctor Mark Salter, del Colegio de Psiquiatras de Reino Unido, a BBC Three. “Es un comportamiento que puede verse en personas que padecen un trastorno depresivo mayor”.

La dysania no es sentirte más cansado de lo habitual en la mañana: es una incapacidad crónica de salir de la cama.

Las personas que la sufren pueden quedarse en la cama durante días y experimentan ansiedad ante la idea de tener que levantarse.

También pueden experimentar una necesidad urgente de volver a la cama una vez fuera de casa.

La dysania puede ser un síntoma de una enfermedad subyacente como la depresión
Cómo identificarla
Según los expertos, la dysania es un síntoma de que algo -físico, emocional o psicológico- no funciona correctamente.

Por lo tanto es poco probable ser diagnosticado sólo con esta condición.

Por lo general se considera que es un síntoma de una enfermedad subyacente como la depresión o el síndrome de fatiga crónica.

Para identificar si alguien está experimentando dysania o clinomanía (un término relacionado que se refiere al deseo de permanecer en cama todo el día), el doctor Salter primero tendría que descartar si existe algún problema físico.

Luego le preguntaría al paciente qué otros síntomas está experimentando. Esto podría conducir a un diagnóstico de depresión.

“La depresión puede afectar al cuerpo de distintas formas”, explica el doctor Salter. “Los trastornos del sueño, el letargo y el despertar temprano en la mañana son síntomas corporales de la depresión”.

Si no puedes dormir evita utilizar el móvil en la cama
“Las personas con depresión severa, por ejemplo, pueden no ser capaces de levantar la mano para beber un vaso de agua”, explica el experto.

Pero si no tienes otros síntomas aparte de no querer salir de la cama, puede que simplemente se te de muy mal levantarte por las mañanas.

Cómo combatir el letargo
Si no estás seguro de si tu letargo es un síntoma de una enfermedad más grave, intenta cambiar tus hábitos a la hora de dormir.

Primero, trata de regular cuánto duermes. La mayoría de los adultos necesitan entre seis y nueve horas.

Haz un poco de ejercicio cuando te levantes por las mañanas e intenta acostarte a la misma hora cada noche.

La relajación es clave: intenta tranquilizarte antes de ir a dormircon un baño relajante o algo de ejercicio ligero, como estiramientos de yoga.

No te olvides de eliminar las distracciones como teléfonos móviles y computadoras portátiles.

Otra manera de relajarte puede ser el sexo o la masturbación: a diferencia de otras actividades físicas, el sexo da sueño.

Si después de todo esto sigues experimentando ansiedad o depresión a la hora de levantarte de la cama, consulta con tu médico.

Pueda que sientas que simplemente eres un perezoso, pero a menos que vayas a revisión nunca lo sabrás con seguridad.

 

Fuente: www.bbc.com

Cuando Vienen las Olas Reflexion

Un niño se hizo un barquito de madera y salió a probarlo en el lago, pero sin darse cuenta, el botecito, impulsado por un ligero viento, fue mas allá de su alcance. Apenado corrió a pedir ayuda a un muchacho mayor que se hallaba cerca, para que le ayudara en su apuro. Sin decir nada, el muchacho mayor empezó a coger piedras y echarlas, al parecer en contra del barquito.

El pequeño pensó que nunca tendría su bote otra vez y que el muchacho grande se estaba burlando de él, hasta que se dio cuenta que en vez de tocar el bote, cada piedra iba un poco mas allá de éste y originaba una pequeña ola que hacía retroceder el barco hasta la orilla.

Cada piedra estaba calculada. Por último, el juguete fue traído al alcance del niño pequeño, quien quedó contento y agradecido con la posesión de su pequeño tesoro.

 

A veces ocurren cosas en nuestra vida que perecen desagradables, sin sentido ni plan; pero si esperamos un poco nos daremos cuenta de que cada prueba, cada tribulación, es como una piedra arrojada sobre las quietas aguas de nuestra vida, que nos trae más cerca de la felicidad.

Desconozco su autor

El huracán Willa toca tierra cerca de Escuinapa, en la costa noroeste de México

El ojo del huracán Willa tocó tierra en la tarde de este martes en la costa suroeste de México con vientos máximos sostenidos de 195 km/h, categoría 3 en la escala de Saffir-Simpson.

Willa llegó a la costa del Pacífico mexicano alrededor de las 20:00 horas (1:00 GMT del miércoles) cerca de la localidad de Escuinapa, en el estado de Sinaloa, según el Servicio Meteorológico Nacional de México (SMN).

El SMN reportó Willa se desplazaba hacia el interior del país a 17 km/h y que se registraron algunas rachas de viento de hasta 240 km/h.

El SMN prevé que Willa origine “tormentas torrenciales en Sinaloa, Nayarit y Jalisco, tormentas intensas en Durango”, además de “oleaje mayor a 5,4 metros, con posibles trombas marinas frente a las costas de Sinaloa, Nayarit, Jalisco, Colima y Michoacán”.

 

Willa llegó a ser un huracán categoría 5, la máxima en la escala de Saffir-Simpson, lo que había hecho que se extremaran las precauciones.

Ya horas antes del que el huracán tocara tierra, los mexicanos estaban en alerta, miles fueron evacuados de la zona que se preveía el impacto iba a ser mayor.

Además, se prepararon refugios temporales para los potenciales afectados.

En Mazatlán, los comercios se protegieron con tablones de madera.
En Mazatlán, un popular centro turístico de Sinaloa, desde el lunes ya se podían ver hoteles, bancos y almacenes con tablones de madera protegiendo ventanas y puertas.

El coordinador nacional de Protección Civil de México, Luis Felipe Puente, calcula que se había trasladado a refugios y zonas más seguras aproximadamente la mitad de las 200.000 personas que habitan las partes más vulnerables de Sinaloa y Nayarit.

En Escuinapa, las televisiones mostraron las fuertes ráfagas de viento estremeciendo las palmeras y las torrenciales lluvias que trajo el huracán. Además, se reportaron cortes de energía eléctrica.

En Mazatlán, el turista estadounidense Oscar Castro dijo que la noticia del huracán le había tomado por sorpresa.

“Nos encanta venir, venimos casi cada año. Pero el problema es que con este huracán, ni sabíamos que venía un huracán, pensábamos que iba a ser sólo una tormenta”, dijo Castro.

“Y luego lo comprobamos y nos dijeron ‘parece que va a ser una tormenta categoría 3 a 5’, así que nos quedamos asombrados. Da mucho miedo”.

“Mi casita es de lámina, madera y cartón, y me da miedo de que se me vaya a caer encima”, dijo Rosa María Carrillo, de 36 años, en un refugio temporal con sus cinco hijos, de entre 8 y 15 años.

“Ojalá que sea nada más un poco de agua, nada más”, agregó la mujer, citada por la agencia Reuters.

 

Fuente: www.bbc.com

Cómo saber cuándo tu hijo se está portando mal o tiene un problema de salud mental

Presenciar a un niño con berrinche no es agradable. Especialmente si tú eres el padre o el profesor que está a cargo del menor.

Si además la rabieta sucede en un lugar público o en la clase del colegio, la situación es aún peor.

Pero, ¿cómo podemos saber realmente si el niño o niña en cuestión está siendo simplemente caprichoso o realmente hay un problema más serio detrás?

“Por lo general los alumnos no llegan a la escuela un día y dicen ‘ahora me voy a portar mal’”, asegura Pepe Di’Iasio, director ejecutivo del Instituto Gales de Sheffield, en Inglaterra.

Según él, alrededor del 80% de los problemas con los que tienen que tratar las escuelas tienen que ver directamente con alguna situación en la vida familiar del niño.

La ansiedad puede manifestarse de muchas formas, especialmente en niños que no pueden comunicarse bien o no tienen herramientas para gestionar sus emociones.

“No quiero sugerir que todos los problemas de salud mental impliquen un mal comportamiento pero es inevitable que haya cierta relación. Cuando alguien necesita algo de apoyo y no lo recibe, puede afectar negativamente a su comportamiento”.

Cuestión de instinto
Investigaciones reciente publicadas por la fundación británica Salud Mental sugieren que los niños modifican su comportamiento cuando están “preocupados” o “tristes” por algo.

También concluyen que aunque un niño no llore, no se aísle o no se autolesione no quiere decir que no tenga algún tipo de problema de salud mental.

Una cuarta parte de los 1.323 niños de 10 a 15 años encuestados para este estudio dijeron que las veces que se habían sentido deprimidos o con ansiedad se habían metido en peleas o discusiones.

Otra cuarta parte dijo que les costaba realizar sus tareas.

Si un menor se mete constantemente en peleas o su rendimiento escolar disminuye es una señal de alerta, dicen los expertos.
Es probable que ambos comportamientos signifiquen que el niño está teniendo problemas en casa.

Karen Young, psicóloga y escritora del sitio web de psicología Hey Sigmund, dice que la ansiedad puede provenir de un cerebro sano, sin patologías.

“Pero cuando (el cerebro) detecta una amenaza, ya sea real o imaginaria, llena el cuerpo de hormonas como la adrenalina para hacer que el cuerpo sea fuerte, rápido y capaz de soportar la presión. Esa es la respuesta natural que nos ha mantenido con vida durante miles de años”.

“Esa es la reacción normal de un cerebro sano. En el caso de los niños con ansiedad, cualquier situación nueva, desconocida, difícil o estresante es una amenaza potencial”.

“Es un tipo de respuesta que requiere de una actividad física intensa. Si la amenaza fuera real, sería como estar luchando por la propia vida de uno”.

Algunos niños y niñas tienen rabietas porque no saben o pueden lidiar con sus emociones de otra forma.
Teniendo en cuenta esto, es fácil ver por qué cuando los niños o jóvenes tienen ansiedad acaban dándose de puñetazos en el recreo o tienen algún berrinche o rabieta.

Un diagnóstico erróneo
El doctor Antonis Kousoulis, director de la asociación Salud Mental, dice que a los jóvenes con problemas de salud mental que no han sido diagnosticados a menudo se les tacha de niños problemáticos.

“Ellos son los alborotadores, los niños que interrumpen en clase… Así es como se les ve”, explica.

Esto es particularmente cierto en el caso de los niños, que tienen tasas de exclusión más altas que las niñas.

“Los niños tienden a externalizar más los cambios de comportamiento”, dice el doctor. “Tienden a meterse en peleas, discusiones y pueden sentirse mucho más frustrados. Las chicas tienden a interiorizar sus sentimientos, simplemente quieren que las dejen solas”.

Entonces, ¿cómo pueden los padres y los maestros saber cuándo el mal comportamiento de un niño se debe a un problema de salud mental y cuándo no?

Algunos menores que atraviesan dificultades emocionales prefieren recluirse y aislarse.
Según el sitio de internet Mentally Healthy School (Escuelas con Salud Mental), el comportamiento es a menudo la forma que tienen los niños de comunicar su angustia o sus problemas.

“Por lo tanto, es esencial entender lo que un niño está tratando de decirte a través de su comportamiento”, dice.

“Los problemas de conducta severos y persistentes, generalmente conocidos como trastornos de conducta, son el problema de salud mental más común durante la infancia”.

Algunas señales a tener en cuenta:

• Contestaciones, irascibilidad, enojos frecuentes, falta de colaboración.

• Tener berrinches y arrebatos frecuentes.

• Mantener constantemente una actitud desafiante o culpar a los demás por las cosas que salen mal.

Brenda McHugh, ex maestra y cofundadora de Family School, un centro de educación alternativa con una buena valoración por parte del Ministerio de Educación británico, dice: “Es un problema que nos encontramos constantemente”.

“¿Cuándo se trata de una falta de comunicación de un problema y cuándo es un síntoma de algo más serio? Es muy difícil de determinar”.

Las niñas, a diferencia de los niños, suelen interiorizar más su problemas y prefieren quedarse aisladas.
La clave a tener en cuenta es la frecuencia con la que ocurre ese comportamiento.

“La mayoría de los niños llevan algunas situaciones al límite alguna vez o tienen poco control sobre sus impulsos o no se comunican bien”, afirma McHugh.

“Cuando estos comportamientos persisten en el tiempo y no responden a patrones lógicos, además de ser un peligro para el desarrollo del menor y de su propia vida, hemos de investigar de forma más profunda qué le sucede”.

Controlar las emociones
McHugh asegura que a veces los niños pueden estar intentando dilucidar en quién confiar o tratando de manejar una situación o unos sentimientos que les resultan difíciles de gestionar.

Pueden tener poco control sobre sus impulsos, dice, y les resulta difícil regular sus emociones.

“Un niño de 10 años de nuestro centro dijo que creía que todos lo veían como un ‘alumno difícil con problemas de salud mental’”, dice.

“Pero se describía a sí mismo como alguien con preocupaciones que estaban relacionadas con la salud física de su madre y con sus frecuentes ingresos en el hospital. Simplemente no sabía cómo manejarlo”.

Es importante la diferencia que puede haber en cómo un profesor califica ese comportamiento y cómo el menor que la experimenta lo entiende o justifica.

Como padres y educadores debemos ser pacientes y explorar por qué un niño está teniendo determinado comportamiento y ofrecerle apoyo.
Un pequeño estudio en una escuela secundaria en Westminster (Londres) con un grupo de niñas de 12 a 14 años que estaban constantemente en problemas demostró perfectamente esta situación.

Las niñas dijeron que estaban sufriendo de ansiedad, pero las maestras las calificaron de “problemáticas”.

Kousoulis cuenta que muchas escuelas están haciendo cosas excelentes en este campo y que a pesar de que no es una tarea fácil hay que seguir trabajando en ello.

“Si no abordamos los problemas de salud mental en una etapa temprana, entonces corremos el riesgo de fallar a la próxima generación justo cuando acaban de comenzar con sus vidas”.

Fuente: www.bbc.com