Nicolás Maduro anunció este miércoles un acuerdo con la Cruz Roja para permitir que entre a Venezuela ayuda humanitaria.
En una retransmisión por televisión y radio, Maduro dijo que su gobierno y los comités internacionales de la Cruz Roja llegaron a un acuerdo para trabajar conjuntamente con los organismos de la Organización de Naciones Unidas (ONU), y traer así a Venezuela “todo el apoyo, toda la ayuda de carácter humanitaria que pueda traerse”.
El pasado 30 de marzo, la Federación Internacional de la Cruz Roja (Ifrc) ya anunció que comenzaría en 15 días una operación de ayuda en el país suramericano comparable a la que desarrolla en Siria.
El anuncio de Maduro se produce después de que, el pasado febrero, su gobierno bloqueara la entrada de cargamentos con material humanitario impulsados por el líder opositor y “presidente encargado” del país, Juan Guaidó.
Entonces, los intentos para entrar esos cargamentos acabaron en altercados a lo largo de las fronteras con Colombia y Brasil.
Maduro argumentó que dejar pasar esos cargamentos, gran parte de ellos provistos por Estados Unidos, sería el primer paso de una intervención liderada por Washington.
Venezuela pasa por una profunda crisis social y política, que en los últimos meses se ha agravado por las graves fallas en el servicio eléctrico.
Maduro ha negado que Venezuela esté sufriendo una crisis humanitaria y atribuye los problemas económicos del país a las sanciones de Estados Unidos.
Por su parte, Guaidó, quien ha sido reconocido como “presidente interino” de la nación por más de 50 países, culpa de la crisis a la mala gestión del mandatario y la corrupción.
Una ayuda politizada
Análisis de Guillermo Olmo, corresponsal en Venezuela
El gobierno de Nicolás Maduro negó repetidas veces la existencia de una emergencia humanitaria en Venezuela, incluso ante las evidencias de que los alimentos y las medicinas escaseaban en el país.
Acusaba a los medios de comunicación de construir un retrato negativo para justificar una intervención extranjera que lo derrocara.
Ahora, después de que distintas instancias nacionales e internacionales hayan señalado las graves carencias que sufren los venezolanos, Maduro está dispuesto a recibir la ayuda que ofrece la Cruz Roja.
El anuncio llega el mismo día en que Mark Lowcock, jefe de Ayuda de Naciones Unidas, le dijera al Consejo de Seguridad que Venezuela sufre “un problema humanitario muy real”.
Ha pasado poco más de un mes desde que Maduro ordenara a sus fuerzas de seguridad repeler el intento liderado por el líder opositor, Juan Guaidó, de introducir la ayuda enviada por Estados Unidos y algunos de sus aliados.
Crisis en Venezuela: las dificultades para conseguir agua en Caracas cuando hay apagones
El gobernante calificó el intento como un “show” y distintos actores humanitarios, como la Cruz Roja, advirtieron entonces contra el riesgo de politización de la ayuda humanitaria que necesita la población.
Con el país sumido en una ola de cortes de luz y agua que han agravado la situación, Maduro acepta la solución que le ofrece Cruz Roja para un problema que nunca antes había admitido.
Pero tampoco ahora, el asunto quedará exento de carga política. El gobierno muestra el acuerdo como un gesto de buena voluntad y la prueba de que el intento de Guaidó no era más que una invasión encubierta.
La oposición destaca que ha sido su presión la que ha obligado a Maduro a dar su brazo a torcer.
Sea como sea, comienza ahora una tarea ingente y urgente para paliar el sufrimiento de los cientos de miles de venezolanos en situación de necesidad.
Según la organización humanitaria, el despliegue que llevará a cabo en el país sudamericano será de un calibre similar al realizado en Siria, una nación devastada por ocho años de guerra.
Alimentos y suministros médicos
En su intervención este miércoles, Maduro señaló que es “bienvenido todo lo que sea legal”.
No obstante, destacó que “desde hace mucho tiempo Venezuela recibe de China, Rusia, Turquía, India” y la Organización Panamericana de la Salud apoyo “de ayuda humanitaria”, según recoge la Agencia Efe.
El pasado marzo, desde la Ifrc indicaron que se ofrecerá asistencia a unas 650.000 personas.
La operación incluirá toneladas de alimentos y suministros médicos.
“Si todos van a respetar lo que se discutió, esta es una operación muy similar a lo que está pasando en Siria en cuanto al número de personas que van a ser atendidas”, apuntó el presidente de la Ifrc, Francesco Rocca, quien valoró entonces que esto es solo un “inicio”para tratar de responder a la crisis.
Fuente: www.bbc.com