Horario de verano: el investigador que plantea 5 formas en las que la vida mejoraría si todo el año se mantuviera el mismo horario

El cambio de horario siempre supone una situación incómoda.

Cada vez que se acercan estas fechas surgen las preguntas sobre qué día será el cambio, si hay que adelantar o atrasar el reloj, o el miedo a levantarse una hora más tarde o más temprano al día siguiente.

En Estados Unidos el horario de verano comenzará el 10 de marzo y en México el 7 de abril, cuando el reloj se adelantará una hora. En otros países como Chile, el 6 de abril comenzará el horario de invierno y los relojes se retrasarán una hora.

En países como EE.UU., existe un debate sobre si vale la pena el cambio de horario, o si es mejor tener un mismo horario durante todo el año.

En ese país, la medida de adelantar una hora en marzo se adoptó a finales de la Primera Guerra Mundial, con el fin de ahorrar energía, basados en la idea de que cuando hay una hora más de luz en la noche se reduce el consumo.

Hoy, sin embargo, quienes se oponen a este horario, sostienen que el ahorro no es tanto.

En el estado de Indiana, por ejemplo, un estudio mostró que durante el horario de verano la gente usaba menos energía en iluminación, pero utilizaba más el aire acondicionado, pues entrada la noche aún se siente el calor del sol.

Según Michael Downing, autor del libro “La locura anual del horario de verano”, durante este horario de hecho aumenta el consumo de gasolina, pues entrada la noche la gente aún sigue manejando sus carros en las calles.

Otros, se quejan de que para los niños resulta peligroso ir al colegio cuando todavía no amanece.

Pero quienes defienden el horario de verano y, de hecho, recomiendan mantenerlo todo el año, también tiene sus argumentos.

Uno de ellos es Steve Calandrillo, profesor de Leyes y Economía en la Universidad de Washington y autor de la investigación “Tiempo bien empleado: un análisis económico de la legislación sobre el horario de verano”.

En un artículo publicado en el portal The Conversation, Calandrillo, plantea 5 aspectos de la vida que, según él, mejorarían si durante todo el año se mantuviera el horario de verano, es decir, cuando se gana una hora de luz durante la noche.Las conclusiones de Calandrillo están basadas en datos de EE.UU., pero las dinámicas que describe podrían aplicarse a cualquier urbe en la que haya cambio de horario dos veces al año.

1. Se salvarían vidas
“La oscuridad mata”, dice Calandrillo, “y la oscuridad en la noche es mucho más letal que la oscuridad en la mañana”.

Según los datos que ha recopilado el abogado, las horas punta del final de la tarde son dos veces más fatales que las de la mañana, porque hay más gente en las carreteras, hay más conductores alcoholizados, la gente va con más prisa para llegar a casa y más niños están jugando en las calles sin supervisión.

Calandrillo dice que las cifras muestran que los atropellos de vehículos a peatones se triplican cuando cae el sol.

Así, el horario de verano le añade una hora extra de luz a la tarde para mitigar estos riesgos, mientras que el horario estándar hace lo contrario, desplaza la luz del sol hacia la mañana.

2. La delincuencia disminuiría
“La oscuridad es también amiga del crimen“, escribe el abogado.

Los criminales prefieren hacer su trabajo en la oscuridad de la noche. Según Calandrillo, las tasas de delincuencia son 30% más bajas en la mañana que en horas de la tarde, incluso cuando esas horas de la mañana transcurren antes de que amanezca, cuando todavía está oscuro.

3. Se ahorraría energía
Al final de la tarde y durante las primeras horas de la noche, prácticamente todo el mundo está despierto, dice Calandrillo, lo que significa un mayor consumo de energía.

Al amanecer, en cambio, una parte considerable de la población aún duerme, por lo tanto hay menor consumo.

“Tener más sol en la noche no solo requiere menos electricidad para proporcionar iluminación, sino que también reduce la cantidad de petróleo y gas necesaria para calentar los hogares y las empresas cuando las personas más necesitan esa energía”.

“En el horario estándar el sol sale antes, lo que reduce el consumo de energía de la mañana, pero solo la mitad de los estadounidenses están despiertos para poder aprovechar el sol“.

4. Mejoraría la calidad del sueño
Los cambios de horario “causan estragos en los ciclos del sueño de la gente”, dice Calandrillo.

El abogado menciona estudios que muestran que en EE.UU. los ataques cardíacos aumentan un 24% una semana después del cambio de hora en marzo.

Si se mantiene el horario estándar durante todo el año, también se evitaría afectar el sueño de la gente, pero según Calandrillo, este horario no ofrece el ahorro de energía, la disminución de las muertes y la prevención de delitos que sí logra el horario de verano.

5. Aumentaría el comercio y la recreación
Actividades como salir de compras o practicar un deporte son más frecuentes hacia el anochecer que en las primeras horas de la mañana, así que la luz solar no es tan necesaria en ese momento.

Según Calandrillo, por eso es que entidades como la Cámara de Comercio de EE.UU. se muestra a favor del horario de verano.

Como punto en contra del horario de verano, Calandrillo menciona que hay una hora más de oscuridad en las mañanas, pero según él “las ventajas del horario de verano sobrepasan de lejos las del horario estándar”.

“Ya es hora de que los EE.UU. adelanten los relojes para siempre y nunca tengan que cambiarlos de nuevo”.

Fuente: www.bbc.com

Día de la Mujer: cuáles son los 6 únicos países que otorgan a hombres y mujeres los mismos derechos económicos

El número de países que otorgan a hombres y mujeres derechos económicos legales iguales aún se mantiene en un solo dígito.

Según el Banco Mundial, la “paridad total” sólo se da en seis de las 187 naciones analizadas en su reciente informe titulado “Mujeres, negocios y la ley”.

La institución con sede en Washington examinó los datos recogidos durante diez años que analizaban la desigualdad financiera y legal y otros factores como la libertad de movimientos, la maternidad, la violencia doméstica y la gestión de activos.

El organismo solo considera a Bélgica, Dinamarca, Francia, Letonia, Luxemburgo y Suecia como países con plena igualdad entre géneros en estas áreas.

¿En qué países las mujeres y los hombres tienen los mismos derechos económicos?
País Igualdad de derechos (en %)
Bélgica, Dinamarca, Francia, Letonia, Luxemburgo y Suecia 100%
Austria, Irlanda, Portugal, España, Reino Unido 97,5%
Australia, Islandia, Serbia 96,8%
Perú 95%
Alemania, Islas Mauricio 91,8%
Ecuador 89,3%
Estados Unidos 83,7%
Brasil 81,8%
China 76,2%
Rusia 73,1%
India 71,2%
Indonesia 64,3%
Bangladesh 49,3%
Pakistán 46,2%
Irán 31,2%
Arabia Saudita 25,6%
Fuente: Banco Mundial
A nivel mundial, las mujeres disfrutan de alrededor del 75% de los derechos que tienen los hombres.

Diferencias regionales
El puntaje promedio varía considerablemente entre las diferentes regiones.

Mientras en Europa y Asia Central alcanza el 84,7%, en Medio Oriente y África del Norte cae al 47,3%.

Estados Unidos, con un 83,75% de igualdad entre hombre y mujeres, ni siquiera se posiciona entre las 50 primeras naciones.

Arabia Saudita, cuya legislación restringe notoriamente los derechos de las mujeres, ocupa la última posición en la lista con un puntaje de 25,6%.

“Desde una mujer joven de 25 años que consigue su primer empleo, una madre que intenta conciliar su trabajo con el cuidado de sus hijos, hasta una mujer que está a punto de jubilarse, el índice analiza cómo afecta la ley a las decisiones económicas que adoptan las mujeres”, dijo en un comunicado Kristalina Georgieva, presidenta interina del Banco Mundial.

“Muchas leyes y regulaciones continúan impidiendo que las mujeres ingresen al mercado de trabajo o inicien un negocio. La discriminación puede tener efectos duraderos en la inclusión económica de las mujeres y su participación laboral”.

Sabemos que para lograr la igualdad de género son necesarias más cosas que cambiar las leyes”
Kristalina Georgieva
Presidenta interina del Banco Mundial
Pero el informe también destaca los pasos positivos dados por algunos países.

El informe explica que, en la última década, 131 países aplicaron 274 reformas a las leyes y regulaciones con el objetivo de aumentar la igualdad de género.

Entre estos países están “las 35 economías que introdujeron leyes que protegen a las mujeres del acoso sexual en el trabajo, extendiendo esta protección a casi 2.000 millones de mujeres más que hace una década”, señala el informe.

África subsahariana, la región donde se ubican algunas de las naciones más pobres del mundo, registró en la última década la mayor parte de las reformas que promueven la igualdad de género.

El análisis del Banco Mundial abarcó todos los indicadores de la vida laboral de una mujer, desde la búsqueda de empleo hasta la gestión de una empresa y la obtención de una pensión de jubilación.

Destacó que 33 países pertenecientes a todas las regiones introdujeron el permiso de paternidad y 47 aprobaron leyes sobre violencia doméstica.

“Sabemos que para lograr la igualdad de género son necesarias más cosas que solo el cambio de las leyes”, añadió Georgieva.

“Las leyes deben implementarse de manera significativa, y esto requiere una voluntad política a largo plazo, el liderazgo de hombres y mujeres en todas las sociedades y cambios en las normas y actitudes culturales arraigadas”, dijo.

“En última instancia, los datos nos muestran que las leyes pueden ser herramientas que ayuden a las mujeres en lugar de impedirnos alcanzar nuestro potencial”, sentenció la presidenta interina del Banco Mundial.

Fuente: www.bbc.com

Cuál es “el dilema del prisionero” y qué tiene que ver con las tácticas engañosas que te hacen pagar más caro

Estás en un restaurante con unos amigos disfrutando de una rica comida. Todo ha ido muy bien, hasta que llega la cuenta y debes pagar un 3% de costo adicional por “agradecimiento a la cocina”.

Vas a reservar una habitación en un hotel y encuentras una espectacular oferta a US$25 la noche. Pero cuando das el clic para comprar, ¡sorpresa! Aparece un valor adicional de US$36 por “tarifa nocturna del resort”.

Lo mismo ocurre cuando te cobran “costos administrativos” por el servicio de internet o cuando compras la entrada para ir a un concierto.

“Los recargos obligatorios son una descarada táctica engañosa para enmascarar el precio real”, le dice en una entrevista a BBC Mundo Rafi Mohammed, fundador de la consultora estadounidense Culture of Profit, que asesora a empresas en el desarrollo de estrategias para determinar el precio de sus productos, y autor de varios libros sobre el tema.

El problema, dice el experto, es que la táctica está creciendo en Estados Unidos y, probablemente, en otras regiones del mundo.

El dilema del prisionero
“Cuando hay un costo escondido obligatorio, se trata de una práctica de negocios inmoral“, considera Mohammed.

Afecta a los consumidores, dice, porque les hace más difícil comparar el precio final de un producto y además restringe la competencia porque cuando una firma hace ofertas brillantes, el resto queda en desventaja porque aparentemente cobra más caro.

Es lo que el consultor describe como “el dilema del prisionero de la competencia”.

Consiste en que cuando una compañía utiliza la táctica de los precios engañosos, empuja a las firmas rivales a hacer lo mismo.

“Una empresa lo hace, el resto la sigue y al final el consumidor pierde”, apunta.

El punto clave, agrega, es “la obligatoriedad” del sobrecargo, porque el consumidor debería tener la opción de elegir.

“Es un engaño”
“Es una locura, es un engaño que sigue creciendo, creciendo y creciendo”.

Las empresas que han incurrido en este tipo de prácticas suelen argumentar que la decisión final la toma el consumidor, básicamente porque nadie lo obliga a comprar al momento en que se ha sumado los costos adicionales.

Es decir, si no estás de acuerdo con los sobrecargos, simplemente no compras.

Sin embargo, hay ocasiones puntuales en que el consumidor se ve obligado a pagar (como en el restaurante) porque ya consumió el producto.

O como cuando te atrasas en pagar una cuenta y te llega un recargo inesperado. ¿Es realmente posible decir que no?

Y aunque desde un punto de vista legal, generalmente los contratos establecen ese tipo de cobros, suelen estar escondidos con diminutos asteriscos que son difíciles de leer.

Uno de los casos que ha estudiado Rafi Mohammed es el de la empresa estadounidense que revende tickets: StubHub.

En 2014, la empresa decidió hacer más transparentes los costos del servicio que se incluyen en el precio final.

Los directivos pensaron que los competidores seguirían el mismo camino, dado que varios clientes estaban exigiendo más claridad en los precios.

Pero los demás no siguieron el ejemplo y las acciones de StubHub bajaron significativamente.

Un año y medio después, la firma tuvo que regresar a su anterior política de precios, aunque, destaca Mohammed, los usuarios tienen la opción de ver todos los cargos que aparecerán en el precio final.

La trampa
“Para que los mercados libres prosperen, se requiere buena información sobre productos y precios”, considera el experto.

“No hay un punto a favor en la táctica de los precios falsos porque su propósito es engañar, restringiendo la competencia”.

Y bajo este escenario, agrega, hay muy pocos incentivos para que las empresas atrapadas en el “dilema del prisionero” vayan contra la corriente y hagan los precios más transparentes.

“Es hora de tener leyes que protejan a los consumidores de estos juegos de precios“, dice.

En el caso de los restaurantes que recargan el precio final con un 3% por “agradecimiento a la cocina”, Mohammed critica la trampa oculta en la estrategia.

La justificación es que ese 3% es para pagarle el salario a los empleados que trabajan en la cocina y que no tiene relación con la propina.

“Esta es una práctica sospechosa”, apunta.

“Yo estoy a favor de contribuir a pagar el sueldo de los trabajadores de la cocina, pero los restaurantes deberían tener el coraje de ser transparentes y simplemente subir los precios del menú”.

Fuente: www.bbc.com

La Voiture Noire de Bugatti: cómo es el nuevo auto más caro del mundo (y cuánto pagaron por él)

El fabricante de automóviles francés Bugatti presentó este miércoles el vehículo más caro del mundo, vendido a un cliente cuyo nombre no fue revelado por al menos US$11 millones, sin incluir impuestos.

El precio exacto no se hará público, pero se cree que supera el anterior récord registrado: la compra del Sweptail de Rolls-Royce, estimada por medios especializados en al menos US$10 millones.

Con una potencia de motor veinte veces superior a la de un Ford Fiesta, el llamado “La Voiture Noire” (El Automóvil Negro, en una traducción literal del francés) fue fabricado para celebrar el 110º aniversario de Bugatti.

Se cree que el nieto del fundador de Porsche, el magnate austríaco Ferdinand Piech, es el comprador.

Piech es el ex jefe ejecutivo de Volkswagen, dueña de Bugatti. Durante su mandato, se ganó la reputación de apoyar algunos de los proyectos de desarrollo más costosos del grupo automovilístico.

Sin embargo, Bugatti sólo mencionó que el comprador es “un entusiasta de la marca”, una de las más valoradas en la industria del motor.

El presidente de Bugatti, Stephan Winkelmann, destacó que La Voiture Noire combina una “tecnología y estética extraordinaria” junto al “lujo extremo”.

El nuevo modelo tiene una carrocería de fibra de carbono, 1.500 CV y un propulsor de gasolina de ocho litros y 16 cilindros.

Bugatti no ha precisado la velocidad que puede alcanzar su nuevo vehículo, pero sus características son similares a otras increíbles piezas de ingeniería de la firma, como el Chiron.

El Chiron es capaz de acelerar de 0 a 100km/h en 2,4 segundos y puede alcanzar una velocidad máxima de 400 km/h.

La Voiture Noire, según Bugatti, es un homenaje a su legendario Type 57 SC Atlantic.

Solo se fabricaron cuatro unidades de este modelo, entre 1936 y 1938, y el diseñador de moda Ralph Lauren es el dueño del último de ellos.

Fuente: www.bbc.com

5 cosas fáciles que puedes hacer para mejorar tu satisfacción en el trabajo

La primera reacción de muchas personas cuando les preguntas qué mejoraría su satisfacción en el trabajo suele ser “un aumento de salario”.

Pero si ese no es el factor que te apremia, hay muchas otras cosas que te pueden tener en jaque, incluso si conseguiste una posición laboral con la que habías soñado por mucho tiempo.

Michael Melcher, asesor ejecutivo estadounidense y socio de la empresa Next Step Partners, lleva años entrenando a líderes y profesionales en el desarrollo de sus carreras.

Egresado de las universidades de Harvard y Stanford, este abogado estadounidense asegura que en muchas ocasiones hay razones que te mantienen insatisfecho sin que te des cuenta.

Él trabaja con personas que tienen empleos considerados interesantes y de alto estatus, pero eso no es necesariamente una garantía de satisfacción laboral.

“La principal razón para no estar satisfechos con su trabajo es que no se han tomado el tiempo para examinar quiénes son realmente, qué actividades disfrutan, para qué son buenos”, le dice Melcher a BBC Mundo.

La segunda razón, explica, es que naturalmente las personas cambiamos con el tiempo.

“Lo que alguna vez fue satisfactorio o interesante deja de serlo y tenemos que descubrir qué es lo que realmente queremos hacer”, agrega.

“Es fácil culpar a factores externos por nuestro malestar, como tener malos jefes, falta de tiempo o inestabilidad corporativa”.

Pero de acuerdo a su experiencia, los factores internos de cada persona, suelen ser los más importantes.

Estos son cinco pasos que te pueden ayudar a mejorar el nivel de satisfacción en el ámbito laboral, según Michael Melcher.

Paso 1: Invierte 20 minutos al día trabajando “sobre” tu carrera y no “en” tu carrera
No es necesario hacer un gran cambio para avanzar. Las cosas que haces sistemáticamente cada día son más importantes que lo que haces de vez en cuando.

La clave está en tomar un objetivo y dividirlo en partes, para avanzar paso a paso.

Ahora bien, si divides tus tareas entre las cosas importantes y las cosas urgentes, la mayor parte del desarrollo profesional a largo plazo caerá en la categoría de importante, pero no urgente.

Y eso puede terminar siendo una trampa, porque es probable que sigas postergando aquello que no requiere una respuesta inmediata.

“Invertir 20 minutos al día en tareas importantes, que no son urgentes, ayuda a resolver la tendencia a procrastinar”.

Paso 2: En vez de quedarte meditando, crea experimentos para probar las cosas
Aprendemos a través de la experimentación de las cosas, no reflexionando sobre ellas todo el tiempo.

Dedicar tiempo para pensar lógicamente sobre tu carrera puede no ser la mejor estrategia. Es muy difícil “pensar” la manera de llegar a la respuesta correcta.

Lo más aconsejables es intentar diferentes cosas y después evaluar qué estamos aprendiendo de esa experiencia.

Paso 3: Recolecta tu propia información en 360 grados: pregúntale a otros cómo te ven
Es recomendable sentarse con un amigo y pedirle que te ayude a hacer algunos ejercicios.

Uno de ellos, por ejemplo, es pensar sobre una buena experiencia laboral, o un momento en que estabas realmente comprometido con algún proyecto de trabajo.

Incluso puedes ponerte en un escenario donde te sentías realmente bien, como corriendo un triatlón o viajando.

Pregúntate cosas como: ¿qué estaba haciendo exactamente? ¿qué sentía? ¿quiénes participaban? ¿cuál era mi talento?

Y le puedes preguntar a la otra persona que te acompaña en el ejercicio, ¿qué patrones se repiten en mi?

Es posible que algunas de esas respuestas te permitan identificar algunos de tus valores fundamentales.

Paso 4: Recoge distintas visiones, sin evaluar inmediatamente si son ideas prácticas
Traza diferentes posibilidades de trabajo. Todas, sin importar si son factibles o cuáles son más razonables que otras.

Con esa lista, piensa en varias preguntas para cada uno de ellas.

Por ejemplo, ¿qué tan interesante sería hacerlo? Usa una escala de 1 a 10 para la respuesta.

Segundo, ¿qué tan difícil sería ponerlo en práctica? Y por último, ¿cuánto realmente sabes de ese trabajo que estás imaginando? ¿que tan profundo es tu conocimiento?

Paso 5: Acepta que las carreras no son lineales
Todas las profesiones tienen transiciones y ciclos.

No importa lo bien que manejes tu carrera, o qué tan competente seas, generalmente todos pasamos por ciclos altos y bajos.

“Mi experiencia se parece más bien a un modelo de espagueti”, dice Melcher.

Puedes dar dos pasos adelante, dos atrás, o avanzar hacia el lado.

No significa que estés haciendo las cosas mal. Significa que estás explorando la mejor manera de satisfacer las demandas del momento en el que se encuentra tu vida.

El “crecimiento paralelo”
El hecho de que las carreras no sean lineales se relaciona directamente con la estrategia del crecimiento paralelo.

Básicamente se trata de desarrollar intereses, competencias y conexiones que se relacionan con un interés en particular, mientras estás desarrollando otra cosa como carrera principal.

Por ejemplo, si trabajas en marketing o finanzas, pero tienes un interés en la política, el crecimiento paralelo te permitiría encontrar maneras para aprender, experimentar y conectar con otras personas en ese campo alternativo.

Y otro aspecto relevante es no hacerse un boicot.

“Cuando se nos presenta un destello de algo interesante, a veces decidimos que no va a funcionar, o que no es práctico, o que no estamos seguros”.

Por eso no está demás prestarle atención a esas pequeñas señales.

“La mayoría de las pasiones de la gente no son obvias. Es más probable que comiencen como una intuición, un sentimiento o un atisbo, antes que un rayo”.

Fuente: www.bbc.com