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La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, prometió que jamás pronunciará el nombre del autor de los ataques contras las mezquitas de Christchurch.
“Él buscaba varias cosas con este acto de terror, pero una de ellas era notoriedad, por eso ustedes nunca me escucharán decir su nombre”, dijo Arden en un emotivo discurso en el parlamento de Nueva Zelanda.
Los tiroteos en dos mezquitas el viernes pasado dejaron un saldo de 50 muertos y decenas de heridos.
Brenton Tarrant, un australiano de 28 años que se describe a sí mismo como supremacista blanco, está acusado de asesinato.
Nombrar a las víctimas
“Les imploro, digan los nombres de aquellos que murieron en lugar del nombre de quien los mató. Él es un terrorista. Es un criminal. Es un extremista. Pero, cuando yo hable, él no tendrá nombre”.
Durante una reunión especial del parlamento el martes, Arden utilizó el saludo en árabe “Al-Salaam Alaikum”, que en español significa que “la paz sea contigo”.
La primera ministra instó a las redes sociales a hacer más para combatir el terror, luego de que el atacante de Christchurch transmitiera en vivo su ataque por Facebook.
“No podemos simplemente relajarnos y aceptar que estas plataformas existen y que lo que se dice allí no es responsabilidad del sitio en el que se publica”, sentenció Ardern.
“Ellos son los editores. No sólo los mensajeros. No puede ser un tema de solo ganancias y ninguna responsabilidad”.
Facebook dijo el martes que el video fue visto menos de 200 veces durante la transmisión en vivo, y cerca de 4.000 veces en total antes de que fuera eliminado.
La compañía aseguró que había retirado más de 1,5 millones de copias del video en las primeras 24 horas después del incidente, de las cuales 1,2 millones fueron bloqueadas en el momento que fueron subidas a internet.
Funerales
Ardern le aseguro a los parlamentarios que el atacante se enfrentará “a toda la fuerza de la ley”.
Asimismo, alentó a los neozelandeses a reconocer el sufrimiento de la comunidad musulmana este viernes, que es el día de rezos de los musulmanes y cuando se cumple una semana desde la masacre.
En la tradición islámica es importante limpiar y enterrar a los muertos lo más rápido posible pero, debido al lento proceso de identificación y documentación forense,ningún fallecido ha sido entregado aún a sus familiares.
Los cuerpos de algunas de las víctimas fueron lavados y preparados de acuerdo a un ritual musulmán el martes, con la ayuda de voluntarios que llegaron del extranjero.
El servicio de inmigración de Nueva Zelanda dijo que estaba procesando visas para los familiares de las víctimas que quieren viajar al país para participar en los funerales.
Entres las 50 víctimas mortales del viernes había inmigrantes musulmanes, refugiados y residentes de otros países incluidos Pakistán, Bangladesh, India, Turquía, Kuwait y Somalia.
El lunes, Ardern anunció que las leyes sobre tenencia de armas en el país serán reformadas y que presentará los detalles en los próximos días.
Según la policía de Nueva Zelanda, el atacante utilizó armas de asalto estilo militar y las modificó legamente para hacerlas más letales.
Fuente: www.bbc.com
